La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) ubicó a los ceresos de Puebla y Tehuacán en un nivel de “riesgo crítico”, debido a que tienen una sobrepoblación superior al 40 por ciento de su capacidad instalada.

Estos dos centros de reclusión forman parte de un grupo de 28 inmuebles en el país en iguales condiciones, los cuales generan problemas de ingobernabilidad, insuficiencia de servicios básicos y falta de acceso a programas de reinserción social efectiva.

La CNDH, a través del informe “La Sobrepoblación en los Centros Penitenciarios de la República Mexicana. Análisis y Pronunciamiento”, examinó 130 reclusorios del país durante 2014, incluyendo varoniles, mixtos y femeniles, de las 32 entidades federativas.

De acuerdo con su evaluación, la sobrepoblación obedece a factores como el uso desmesurado de la pena privativa de libertad; el rezago judicial de los expedientes de gran parte de la población en reclusión, pues casi el 50 por ciento son procesados; la fijación de penas largas, a veces sin la posibilidad de medidas cautelares o el otorgamiento de libertades anticipadas, y la falta de utilización de penas alternativas.  

Entre los 28 reclusorios ubicados en riesgo “critico” se encuentra el Centro de Reinserción Social (Cereso) de San Miguel, en el municipio de Puebla,  con un grado de sobrepoblación del 43.81 por ciento, pues su capacidad instalada es de 2 mil 315 reclusos pero actualmente hay 4 mil 120, es decir 1 mil 805 personas más.

También se encuentra en la lista la penitenciaria de Tehuacán con un grado de sobrepoblación del 48.12 por ciento, ya que sus instalaciones fueron hechas para alojar a 400 reclusos pero conviven allí 771 internos, es decir, 371 más de los que podría albergar.

El pasado dos de octubre, el secretario de Seguridad Pública, Jesús Rodríguez Almeida, reconoció tráfico de estupefacientes en los centros penitenciarios del estado, particularmente en el de San Miguel.

El funcionario recordó que está en puerta la construcción de una nueva penitenciaria, sin embargo, la ejecución de este proyecto depende de la obtención de recursos federales. 

Según el análisis, otros 20 centros se ubicaron en un “riesgo alto” en virtud de exceder el 20 por ciento de su capacidad instalada y 24 centros tienen un  “riesgo moderado” al exceder su capacidad con un interno más y hasta menos del 20 por ciento de su capacidad original.

De acuerdo con la Tercera Visitadora General de la CNDH, Ruth Villanueva Castilleja, la sobrepoblación en el sistema penitenciario nacional debe ser atendida de manera sustantiva por los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, que deben privilegiar el uso de penas alternativas a la prisión, la obtención de libertades anticipadas y la imposición de penas que permitan la reinserción social efectiva.