Antonio, expareja y presunto responsable del asesinato de la joven médica Gabriela Aline, quien fue hallada muerta en su domicilio de la colonia Maravillas, fue vinculado a proceso por el delito de feminicidio, informó la Fiscalía General del Estado (FGE); habría muerto por inyección letal.

De acuerdo con la FGE, tras desahogar la audiencia de vinculación a proceso tras la aportación de los datos probatorios correspondientes, el domingo 17 de septiembre Antonio fue vinculado a proceso.

Además, los dictámenes periciales solicitados por la FGE indican que a Gabriela le fue suministrada la “inyección letal” por parte de su pareja.

Según los exámenes periciales, la muerte se debió a una necrosis hepática masiva secundaria a sobredosis por cloruro de potasio, compuesto químico utilizado como método letal permitido legalmente en algunos países, también conocido como eutanasia.

Las investigaciones sobre el hecho permitieron esclarecer oficialmente que la madrugada del 9 de julio de 2023 Gabriela Aline habría platicado con su madre sobre la decisión de terminar su relación porque “le tenía miedo a su novio”.

“Al despertar, la madre encontró inconsciente a su hija en su cama; Antonio N quien también se encontraba en el lugar le refirió que se había suicidado y para intentar reanimarla, le inyectó diversos medicamentos”, expresa la FGE.

Ese día Antonio fue detenido y puesto a disposición de las autoridades, aunque el juzgado de control en ese momento lo vinculó a proceso sólo por el delito de resistencia de particulares.

A partir de ese momento la familia de Gabriela Aline comenzó a exigir ante las autoridades que la prisión preventiva que se le impuso debió haber sido desde un principio como feminicidio.

Semanas después de lo ocurrido, el fiscal general Gilberto Higuera Bernal aseguró que para proceder a aplicar la perspectiva de género y poder ejercer acción penal por feminicidio debían concluir las “complejas” pruebas que determinaran por completo la participación de Antonio como responsable de la muerte. (JT)