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Múnich 1972: 50 años de los 'Juegos de la Masacre'

  • Edwin García
El saldo de la justa no solo incluyó medallas, sino a 11 atletas y personas muertas, víctimas de un ataque terrorista
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Era 26 de agosto cuando el mariachi mexicano agregó color al Estadio Olímpico de Múnich para inaugurar los Juegos Olímpicos de esa ciudad, en 1972. La nación tricolor entregó de esta forma la estafeta de sede olímpica tras haber recibido la justa cuatro años antes (1968). Pero este albor pudo ser opacado solo unos días después, cuando la Villa Olímpica se vio vulnerada y un grupo palestino acabó con la vida de 11 personas.

Todo pasó en la madrugada del 5 de septiembre. Un total de ocho hombres armados, integrantes del grupo extremista palestino Septiembre Negro, tomaron como rehenes a 11 integrantes del equipo israelí, matando a dos de ellos y privando de la libertad a otras nueve personas, quienes eran una mezcla de deportistas y entrenadores.

Para “dejarles tranquilos” exigieron un trueque de misma moneda con la liberación de más de 200 prisioneros palestinos. No obstante, a los rehenes se les trasladó a un aeropuerto de la ciudad donde comenzó todo un operativo de las fuerzas de seguridad en la entonces Alemania Occidental: el resultado fueron consecuencias adversas.

En el plan que pretendía darles rescate murieron todos los rehenes, además de un oficial de la policía alemana, un piloto y cinco de los ocho terroristas.

 

La Cólera de Dios

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Adnan Al-Gashey, Jamal Al-Gashey y Mohammed Safady fueron los capturados por la policía alemana tras el ataque, aunque los liberó después del secuestro de un avión de la aerolínea alemana Lufthansa, en un intercambio para salvar vidas.

Pero la situación no frenó ahí, pues en los meses siguientes se dio el asesinato de varios integrantes de Septiembre Negro, lo que se cree que fue parte de una operación encubierta israelí denominada “Cólera de Dios”.

En el ataque solo hubo un sobreviviente, Jamal Al-Gashey, de quien hasta finales de los 90 se pensaba que vivía escondido.

“Tenían que pagar un precio por llevar a cabo un acto de terrorismo. No soo se trataba de hacer justicia, no se trataba de ojo por ojo y diente por diente, sino de tratar de crear un efecto disuasorio”, dijo Efraim Halevy, quien dirigió el Mossad (cuerpo de inteligencia israelí) de 1998 a 2002, a un podcast que fue publicado en 2014.

Desde aquel día negro a la fecha han pasado ya 50 años. Es por eso que el gobierno alemán confirmó el viernes pasado la indemnización a familias de los 11 deportistas israelíes con un monto total de 28 millones de euros.

El canciller alemán Olaf Scholz “está muy complacido con el acuerdo alcanzado con las familias de las víctimas”, informó el vocero del gobierno, Steffen Hebesteit, a la prensa en Berlín.

“Alemania destaca su responsabilidad por los errores cometidos allí en 1972, pero también en las décadas siguientes”, añadió.

Aunado a esto, el acuerdo con las familias con el país ha sido reconocer los errores cometidos por las autoridades del momento y permitir que historiadores alemanes e israelíes revisen los sucesos en torno al ataque.

Foto: Twitter

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