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Javi Aznarez, el increíble ilustrador detrás de ‘La Crónica Francesa’
En diciembre del 2021, se estrenó en México una de las películas más esperadas de todo el año por contar una historia diferente, tener un gran elenco, ser aplaudida por más de ocho minutos en Cannes, causar buenas críticas en múltiples festivales de cine y, sobre todo, por estar a cargo del director estadounidense Wes Anderson, cuyo trabajo es bastante aplaudido en la industria del cine por hacer películas únicas, con historias que conmueven, llenas de color, humor, amor, naturalidad, perfeccionismo, simetría y cuando se trata de filmes animados, la ilustración de Wes es muy característica y poco común, regalándonos joyas como “Fantastic Mr. Fox” (2009) o “Isla de Perros” (2018).
En esta ocasión, Anderson nos presentó una historia que hace una oda al periodismo, en la que relata las diferentes aventuras y modos de redacción de una revista ambientada en una ciudad ficticia ubicada en el siglo XX, donde a través de los reporteros, tres historias se enlazan entre sí para dirigirnos a la herencia y las enseñanzas que deja el director de dicho medio antes de morir.
“La Crónica Francesa” (The French Dispatch), es uno de los filmes más ambicioso de Wes y, aunque no es una película cien por ciento animada, cuenta con fragmentos en los que se alternan con los actores y unas ilustraciones demasiado particulares que formaron parte de la publicidad de la película y de las portadas de dicha revista. El trabajo quedó a cargo del ilustrador español Javier Aznarez, quien pasó de hacer un trabajo discreto e imágenes sólo para él a ser un gran referente de este arte y amigo de Anderson.
De Cadaqués para Hollywood y el mundo
Javier Aznarez vivía un poco al margen de todo en Cadaqués, España, donde a lado de su esposa, la también artista Elodie des Longchamps montaron una galería llamada Taller de Tabakov donde trabajan y venden su obra.
Aznarez fue descubierto por la productora de Wes, Octavia Peissel, quien lleva años vacacionando en su pueblo natal y que ya conocía el trabajo de Javi. A Anderson le gustó casi de inmediato y el ilustrador afirma que le dieron mucha libertad para idear la portada de la revista, fue proponiendo ideas y según avanzaba el proyecto crecía su participación.
Tres años tardó “La Crónica Francesa” en ver la luz, tres años en los que Javi se encargó de los créditos, más de 30 portadas, el póster y un videoclip animado con una canción compuesta por Jarvis Cocker. También estuvo en el rodaje dibujando algunos decorados y la mano de Jason Schwartzman (el humorista gráfico de la revista) vio la luz basándose en Aznarez.
Join us for a day in Ennui. “Aline” a music video directed by Wes Anderson. Performed by Jarvis Cocker as Tip-Top.
— The French Dispatch (@french_dispatch) September 22, 2021
Get your tickets for Wes Anderson’s The French Dispatch NOW.
In select theaters October 22. Everywhere November 5: https://t.co/xZGVoOSeBC pic.twitter.com/beH3UHHgfV
En una entrevista para el medio español El País, Aznarez habló sobre su pasado y cómo llegó a ser artista cuando su carrera principal es otra completamente diferente. Como les ocurre a tantos autores de cómic, el dibujo fue para Javi “un mal vicio” que, tarde o temprano, habría que erradicar.
Vivía en Barcelona y estudiaba en un elitista colegio del Opus Dei solo para chicos, donde cuenta se aburría terriblemente y uno de sus profesores optó por darle los textos que iban a ver en Literatura para que los ilustrara; a veces le pedían que hiciese caricaturas en las reuniones del claustro. Quiso estudiar Bellas Artes, pero sus padres le dijeron que ni hablar y así fue como terminó la universidad en la carrera de Empresariales y Marketing en Icade.
Un día vagando por el Salón del Cómic, dio con el stand de la Joso, la escuela de cómic y artes visuales, donde se matriculó por probar y de ahí en adelante no paró, por fin podía dibujar tranquilo.
Su primer libro, una historia de humor futurista se publicó en Casterman, trabajó de taxista y camarero, compaginó las ventas en la galería y sus propios proyectos con la clase de trabajos alimenticios que sostienen a los creativos freelances.
Hizo videos para una marca de licores, dibujos para unos sujetadores ortopédicos y supo que, con su aparición en el cine, la vida tranquila que llevaba lejos de los reflectores cambiaría y, aunque ha tenido propuestas de The New Yorker para hacer la portada, Javi no parece ansioso por capitalizar la oportunidad: ama la sencillez y la tranquilidad de hacer lo suyo por amor en el lugar que ama.
El décimo filme de Wes Anderson se encuentra disponible en la plataforma de Star+. Es una historia envolvente y cautivadora, pero sobre todo hermosa visualmente gracias a Wes y Javi.