La subasta de Morena en Puebla

  • Ruby Soriano
Morena en Puebla sin el mayor rubor subastó principios de una transformación que no es tal

Los morenistas poblanos han dado cátedra de lo que es perder dignidad para reflejar en lo que hoy se han convertido: un partido clientelar donde el que dé más, se queda con los dados en la mesa.

La rebatinga por las candidaturas a diputaciones locales para Morena refleja que, hasta el viejo discurso de las democráticas encuestas, pasó a mejor vida.

Lo que hoy se percibe en la versión poblana del partido presidencial son las ligas de un grupúsculo fáctico que con la venia nacional está subastando candidaturas para priorizar intereses muy bien definidos y que apuntan a personajes plenamente identificados.

No es un secreto a voces que en las épocas brillantes del PRI las candidaturas se negociaban para la venta del que ofrecía dinero contante y sonante.

Hoy Morena está atestado de priistas que tomaron el control y si no “nomás” hay que ver la lamentable imagen de la dirigente estatal Olga Romero Garci-Crespo quien es una figura decorativa a la que le hacen llegar los acuerdos por escrito para que ella sólo firme, esa es la instrucción.

Morena en Puebla sin el mayor rubor subastó principios de una transformación que no es tal, es una gran simulación donde los parentescos son los que a empujones se abren paso para imponer nombres y postulaciones.

Este fin de semana circuló una presunta lista de nombres beneficiados con las postulaciones a diputaciones locales, y si bien la lista oficial no ha sido emitida, estos nombres no están nada alejados de lo que será la realidad final.

Entre los que serán los ganones con candidaturas a diputados locales podrían estar:

Guadalupe Vargas, hija de Ardelio Vargas, Roberto Zataraín (ex pareja de Claudia Rivera), Katia Sánchez, cónyuge de Erick Cotoñeto, María de la Barreda, hija la edil panista Paola Angón; en las pluris Julio Huerta y Francisco Cuena (hijo de la dirigente estatal de Morena).

Pero si esto no era suficiente, por Tepeaca iría Mauricio Céspedes Peregrina, por supuesto, hermano del gobernador en turno, Sergio Salomón Céspedes.

De este tamaño es la desfachatez de un morenismo plagado del pago de cuotas donde se ponen en la mesa los lingotes para abrir la gama de negociaciones que están muy lejos de involucrar principios con los que inicialmente fue fundado el partido que hoy gobierna el país.

Hay personajes que son los nuevos canguros de Morena y son quienes están haciendo el trabajo sucio para subastar lo que sea necesario con tal de alinear candidaturas a billetazos.

Las imágenes grotescas corrieron a cargo de la viuda de Miguel Barbosa, Rosario Orozco cuyo inicio de campaña en Tehuacán estuvo apadrinado por Nacho Mier, el acérrimo enemigo de su difunto marido el exgobernador.

El diputado morenista le levantó la mano a Rosario quien no tiene la más mínima idea de cómo hacer una campaña, ella siente que le dieron “la dote” y con eso basta para alcanzar el fuero por si lo llegara requerir.

Y justamente muchos de los que irán en busca de fuero vía una curul local saben que su dinero les está costando para entrarle a una contienda donde aún creen que podrán ser arrastrados por una ola morenista que poco a poco se ha ido transformando en simple sargazo electoral.

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Ruby Soriano

CEO Mediatikos Consulting. Ganadora Napolitan Victory Award como Mujer Influyente de la Comunicación Política 2019. Consultora y Estratega en Comunicación Política, Gubernamental y Campañas Electorales. Periodista y Analista Política en medios digitales