El pasado domingo 4 de abril dieron inicio las campañas electorales rumbo a los comicios del 6 de junio. Previo a ese día, muchos de los candidatos y candidatas dijeron que harían campañas diferentes.

“Ya quiero que sea el domingo 4 para ver el inicio diferente de las campañas.”

• Dijo nadie, jamás, nunca, en la vida, ni sus seguidores.

Por la obviedad del contexto actual, donde hay una pandemia mundial causando enfermedad y la lamentable muerte de muchas personas, en esta ocasión no puede haber mítines multitudinarios (algo rescatable dentro de todo lo malo). Ante esta situación, vimos candidatos que se pusieron “creativos”. Y aquí entendemos aquella frase de Dalí donde dice que no volvería a México pues no soportaba estar en un país más surrealista que sus pinturas.

Y más allá de los absurdos como llegar en un ataúd, iniciar transmisiones en vivo desde el minuto 00:01 o estar frente a un edificio abandonado que era hospital, lo verdaderamente surrealista es que la gente de esos partidos políticos crean que con los mismos discursos de siempre podrán convencer a la ciudadanía de votar por ellos.

Siguen usando expresiones como “el cambio verdadero”, vaya, siguen usando la palabra “cambio”, como si desde el año 2000 no hubiéramos quedado vacunados de esa palabra con la decepcionante figura de Vicente Fox. Tan vacunados como no lo estaremos contra el covid 19 al menos en un buen tiempo. Pero así siguen, tirándose al piso diciendo que les quitaron su propaganda, o diciendo que solo por ser del partido que gobierna tienen un toque mesiánico. Aquí es donde coincido con el conocido personaje Bruce Julis (@BruceJulis) y su frase: “¿Quién los asesora?”.

Y aclaro, no me refiero a un partido político en especial, y aclaro también, sí hay algunos candidatos y candidatas que están marcando diferencia por su trabajo con cercanía a la gente. Tristemente estos últimos son los menos.

Desde mi humilde y tal vez escueto punto de vista, creo que esos candidatos y candidatas que siguen con los mismos discursos de siempre, deben voltear a ver a la ciudadanía, pero de verdad, no solo ir a tomarse una foto comiendo una cemita o una memela. Deben caminar sus distritos y visitar a la gente, pero a la gente real, no a las estructuras rancias dadas por esos líderes feudales de votos. La respuesta parece sencilla, y aún así muchos políticos no la ven, o quizá no lo quieren ver. Nosotros, como ciudadanos y ciudadanas, hagamos que la vean.

Rescoldos.

Evidenciemos a quienes no hacen bien las cosas, subamos fotos y videos de lo que veamos que no está bien. Y si entre toda la fauna electoral encontramos a alguien que valga la pena, también digámoslo, apostemos por ciudadanizar la política sin politizar a la ciudadanía.

Rafael Reyes Ruiz

@RafaActivista

rafaactivista@gmail.com