Paradoja del secretario de Hacienda

  • Enrique Cárdenas Sánchez
Arturo Herrera será recordado por no enfrentar bien la crisis económica - sanitaria

No cabe duda que uno de los puestos más importantes en un país es el secretario de Hacienda o equivalente. Se encarga de ver por la hacienda pública, que tiene dos brazos para trabajar: los ingresos (impuestos, derechos y aprovechamientos), y los gastos (corrientes y de capital). Su papel es tan importante que de ello depende en buena parte el desempeño de la economía general, su composición, la distribución del ingreso y la riqueza. De ello también depende la solvencia del gobierno, de las finanzas públicas y en última instancia, del país.

Por eso la labor de los secretarios de Hacienda han sido objeto de estudio, análisis y evaluación de los historiadores. Leonor Ludlow coordinó un gran trabajo en dos tomos sobre los proyectos y el trabajo de decenas de secretarios de Hacienda desde que México es país, hasta 1934. Y María Eugenia Romero está coordinando un trabajo sobre economistas y los secretarios de hacienda de los decenios más recientes. Los secretarios de Hacienda son claves y muestran la calidad de un gobierno.

Por eso es interesante asomarse a las semejanzas en las políticas macroeconómicas que siguió Don Luis Montes de Oca como secretario entre 1927 y 1931, justo cuando golpeó la crisis de la Gran Depresión, la mayor que habíamos tenido hasta ahora. Don Luis Montes de Oca era un liberal convencido, que trajo a México a Ludwig Von Mises, uno de los economistas más influyentes en el siglo XX que representaba a la escuela austriaca de economía, caracterizada por su liberalismo extremo.

La Gran Depresión se originó en Estados Unidos se propagó por todo el mundo y golpeó a México de manera brutal. Entre 1929 y 1932 las exportaciones cayeron 65%, los ingresos públicos se contrajeron 34% y la base monetaria cayó 60%. Teníamos enfrente los pagos de la deuda externa que habían sido renegociados ya en dos ocasiones, con imposibilidad de pago, con el Comité Internacional de Banqueros liderado por Thomas Lamont, de J.P. Morgan. La forma como enfrentó la crisis el secretario de Hacienda Montes de Oca se puede resumir en un política que restringió el gasto público, redujo los sueldos de los funcionarios, defendió el tipo de cambio para evitar su depreciación, aumentó impuestos y aceleró el pago de la deuda externa (En ese entonces, México no tenía capacidad de contratar nueva deuda, ni externa ni interna, para evitar la contracción del gasto público).

Naturalmente, esas medidas exacerbaron la crisis de la economía y el PIB se contrajo 17.6% entre 1929 y 1932 (menos 4.7% en promedio anual). Eso sí, tuvo un superávit fiscal en 1930 y 1931 y cero déficit en 1932. El tipo de cambio se mantuvo fijo. En disculpa de Luis Montes de Oca, esas eran las medidas tradicionales que se debían seguir. Aún no aparecía La Teoría General de J.M. Keynes (1936) que recomendaría, en crisis como aquella, la intervención del gobierno para evitar la contracción de la economía.

Hoy tenemos en México un secretario de Hacienda, Arturo Herrera, que se ha comportado esencialmente de la misma forma que Luis Montes de Oca, pero con un planteamiento ideológico contrario al liberalismo y, además, con la ventaja de conocer cómo deben enfrentarse crisis como la actual y la de la Gran Depresión. El secretario Herrera ha reducido el gasto público y la inversión estatal, ha aumentado la recaudación mediante otros impuestos y la inmediata resolución de litigios fiscales (con amenazas del SAT a los causantes para provocar su desistimiento), ha utilizado todo tipo de fondos de reserva y fideicomisos para evitar un déficit fiscal mayor por la caída de los ingresos petroleros. No ha utilizado la línea de crédito que tenemos en el Fondo Monetario Internacional ni contratado deuda para enfrentar la crisis. El resultado es incluso peor al que obtuvo Montes de Oca. El PIB se contrajo casi 9% en 2020 y se espera que el nivel de ingreso per cápita de 2018 se recupere hasta 2025 ó 2026.

Alberto J. Pani se incorporó a la Secretaría de Hacienda en 1932 y modificó la política hacendaria, aumentó el gasto público, dejó libre el tipo de cambio y recuperó la circulación monetaria. El PIB comenzó una vigorosa tendencia a la alza a partir de la segunda mitad de 1932 y, para 1934, ya se había recuperado el nivel del PIB de 1929, antes de la crisis. Desde entonces se sabe qué hacer para enfrentar crisis como la actual.

Paradójicamente, cuando se escriba la historia de los secretarios de Hacienda del siglo XXI, Herrera será recordado como aquél que, siendo miembro de un gobierno “progresista”, no utilizó los instrumentos a su alcance para evitar un estancamiento económico aún más profundo que el de la Gran Depresión. Una crisis de origen sanitario que, al no enfrentarse con la fuerza de la política económica disponible, está causando el cierre de casi medio millón de empresas, la pérdida de cientos de miles de empleos y el aumento de millones de pobres.

 

 

 

 

 

 

 

 

Enrique Cárdenas Sánchez

Universidad Iberoamericana de Puebla

Signos Vitales

Puebla contra la Corrupción y la Impunidad

enrique.cardenas@iberopuebla.mx

@ECardenasPuebla

 

 

 

 

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Enrique Cárdenas Sánchez

Economista, exrector de la UDLAP. ExDirector del Centro de Estudios Espinosa Yglesias. En 2019 fue candidato a Gobernador de Puebla en las elecciones extraordinarias. Director de Puebla contra Corrupción e Impunidad