Con la renuncia de Ramón Cabello Mendizabal, como delegado del Instituto Nacional de Personas Mayores, arrancó el accionar de la guillotina contra delegados federales en Puebla que no han dado resultados al gobierno de Peña Nieto. El nuevo titular del INAPAM en Puebla, a partir de hoy, será el doctor Malco Ramírez Martínez, ex secretario general del Sindicato de Trabajadores de la Secretaría de Salud y ex diputado federal.

Así, de esta manera, la Espada de Damocles caerá, en el transcurso de este mes, sobre el cuello de otros delegados federales, quienes desde el inicio de la actual administración presidencial se han tirado a la hamaca, tomando como pretexto la veda electoral o bien, se han convertido en los campeones de la simulación, pero, -no hay mal que dure cien años, ni enfermo que los aguante-,  ya fueron detectados y en cuestión de días habrá relevos.

El próximo en abandonar el cargo, según trascendió, es Juan Pablo Jiménez Concha al frente de la delegación de la Secretaría de Economía debido a los pobres resultados que definitivamente no corresponden a la dinámica de crecimiento económico que registra la entidad poblana. Además de que al gobierno morenovallista no hace nada de gracia la inacción con que se realizan las tareas en la Delegación de Economía.

El hasta ahora titular Jiménez Concha lamentablemente a convertido a la dependencia en una oficina de mero trámite, dejando todo el peso del trabajo y responsabilidad a la Secretaría de Competitividad, Trabajo y Desarrollo Económico del Gobierno del Estado. Vaya, no justifica su presencia en un cargo de alta responsabilidad, ni el enorme gasto que significa el mantenimiento de la oficina ni el pago de salarios al personal que no hace nada.

Otras de los titulares de delegaciones que están en la mira de la Secretaría de Gobernación, por sus magros resultados, es la Secretaría de Desarrollo Social en Puebla y el Programa Oportunidades. Juan Manuel Vega Rayet y Nancy de la Sierra Arámburu, no han tenido la capacidad ni disposición para hacer frente a los graves problemas de pobreza extrema en que viven miles de familias poblanas. Se han dedicado a la grilla y olvidado sus responsabilidades.

Ellos, Vega Rayet y De la Sierra, siguen en sus reuniones palaciegas, disfrutando de sus atractivos salarios y jugosas prestaciones, importándoles tres pepinos el hambre y necesidades de miles de poblanos. Ellos son los responsables de aplicar los programas para abatir la pobreza, principal objetivo del gobierno federal. Está visto que favorecer a amigos y pagar facturas, no funciona.

La última medición del Consejo Nacional de Evaluación de la Política Social, revela datos impactantes sobre niveles de pobreza que padecen alrededor de 3.8 millones de poblanos quienes no cuentan con lo básico para sobrevivir. Triste y lamentablemente en Puebla se han olvidado de aplicar los programas sociales y debido a ello Puebla cayó al cuarto lugar en niveles de pobreza extrema, solo después de Chiapas, Guerrero y Oaxaca. SALUCITA DE LA BUENA.

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