Santa Cecilia, la música y las bellas artes

  • Elvia de la Barquera
Ejemplo de una vida de mártir como tema artístico a través de la historia occidental

Santa Cecilia, una de las mártires del cristianismo primitivo (siglo III) que -por su facilidad para interpretar música en cualquier instrumento y porque se le atribuye el hecho de escuchar el canto de los ángeles- ha sido reconocida como la Santa Patrona de los músicos, nombramiento que se oficializó en 1594 por el papa Gregorio XIII.

A mediados del siglo V fueron hallados documentos conocidos como Actas de Martirio de Santa Cecilia, donde se describe parte de su historia, misma que narra su conversión al cristianismo, su matrimonio con un pagano por órdenes de sus padres, su ayuda a los más necesitados, y su doloroso martirio al que fue sometida y del que murió tres días después.

Han sido muchos los artistas que en ella se inspiraron para la realización de sus obras y se le reconoce porque se le representa siempre con algún instrumento musical. Sólo mencionaré algunos ejemplos en la pintura y escultura para realizar un breve viaje por la historia del arte y algunos sitios para quien quiera adentrarse un poco más.

El más antiguo data de un encargo realizado en 1514 a Raffaello Sanzio, para la capilla familiar de Elena Duglioli; obra propia del Renacimiento, donde conversa con otros santos y hay instrumentos musicales.


https://www.artehistoria.com/es/obra/santa-cecilia-1

Una de las obras más famosas es la de Guido Reni, un óleo italiano de 1606. Resalta el uso de claroscuro, protagonizando la blancura de la tez de la santa. Hay una clara expresión de sumisión, docilidad y humildad, lo que le facilitó la aceptación de su martirio, importante en el simbolismo religioso de la época.


https://historia-arte.com/obras/santa-cecilia

En un Barroco propio de los países bajos contamos con el ejemplo de Rubens, cuadro pintado en 1639 y al que le distingue una ambientación diferente y una representación más rebuscada, donde el drapeado es parte de la composición general y contrasta con la luminosidad de la piel.


https://www.ebay.es/itm/saint-cecilia-1639-angels-religion-baroque-painting-by-peter-paul-rubens-repro-/380877861909

En 1836, Paul Delaroche pinta Santa Cecilia y los Ángeles, una representación propia del Romanticismo, una imagen limpia, de contornos claros y definidos, exaltando los ideales de una Europa ahora unida por la exaltación de nuevos ideales impulsados desde finales del XVIII.

Ya en el siglo XX, en 1955, Dalí representa en óleo la Ascensión de Santa Cecilia. Al respecto, él mismo dice:

"Lo importante es que hay que pintar los temas de una manera que corresponda a la época en que vivimos, 1951; eso quiere decir que, si Rafael pintaba una virgen según la cosmogonía del Renacimiento, hoy esta cosmogonía ha variado. El mismo tema que pintó Rafael, si lo pintara hoy Rafael, como tendría otros conocimientos (física nuclear, psicoanálisis, por ejemplo), pintaría tan bien como entonces, pero respondería a la cosmogonía de hoy. Y el tema religioso es, para mí, el más antiguo y el más actual; pero ha de ser tratado según los conocimientos científicos de nuestro tiempo.".
Salvador Dalí


https://www.flickr.com/photos/simondownham/8020093455

En cuanto a escultura, no cabe duda que la obra más destacada -por la calidad de talla y por el significado en su representación- corresponde al mármol de Moderno Stefano, de 1600 y que se puede apreciar en la Iglesia de Santa Cecilia in Trastevere. Un cuerpo yaciente que parece que acaba de dar sus últimos suspiros, los dedos de pies y manos aún con movimiento; la cabeza girada con brusquedad para mostrar el corte en el cuello, con lo que finalmente murió después de varios intentos del verdugo.

 

Sólo para complementar quiero agregar algunas composiciones musicales como el Laudate Ceciliam de Henry Purcell (1683); la Oda para el día de Santa Cecilia de Händel (1739), basado en el poema de John Dryden y estrenada el 22 de noviembre en 1739; La Misa de Santa Cecilia de Haydn (1776); la Misa solemne de santa Cecilia, de Charles Gunot (1855); la Oda a las Criaturas de Benjamin Briten (1942). Da la casualidad que Briten nació el día de Santa Cecilia en 1913, y en cuanto a música contemporánea la melodía sueca Sankta Cecilia de Lotta Pedersen (1984) y Cecilia, vergine romana de Avo Pärt, (2000).

Felicidades y agradecimiento a los músicos por su contribución al beneplácito auditivo.

 

 

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Elvia de la Barquera

Egresada de Antropología UDLAP, Bellas Artes Universidad de Barcelona y Doctorada en Espacio Público: Arte-Sociedad UB. Artista, investigadora, docente y Crítica de Arte con publicaciones varias