Manos Descubridoras

  • Abel Pérez Rojas
También podrían salvar vidas de las mujeres mexicanas.

 

“Cualquier discapacidad es potenciadora

de facultades insospechadas”

Abel Pérez Rojas

 

La discapacidad visual no siempre representa una desventaja total para las personas ciegas en relación con el resto de la población.

Cuando una persona pierde alguno de sus sentidos tiende a desarrollar más el resto, porque dicen los especialistas que se presentan fenómenos de compensación y reorganización sensorial.

Hace poco se dio a conocer que en Alemania se ha venido desarrollando un proyecto denominado “Manos Descubridoras” (Discovery Hands), el cual consiste en la intervención de mujeres ciegas en labores de detección de cáncer de mama.

“Manos Descubridoras” fue creado hace aproximadamente seis años por  el ginecólogo alemán Frank Hoffmann.

Hoffmann ideó unas tiras brailles que son colocadas alrededor de los pechos de las pacientes, las cintas dividen en coordenadas las zonas auscultadas, con ello se realizan revisiones específicas a cada micro zona.

Hace poco, Hoffmann afirmó que según evaluaciones de la Essen University’s Women’s se comprobó que “en 450 casos estas evaluaciones intermedias (MTEs) lograron detectar más tumores que los médicos y de menor tamaño” (grupofundosa.es).

Actualmente, dentro de “Manos Descubridoras” se han formado a 20 mujeres ciegas y 18 hospitales han incorporado esta modalidad a sus servicios.

La prospectiva de “Manos Descubridoras” indica que en cinco años podría haber 70 mujeres ciegas debidamente formadas, sólo como etapa intermedia hasta llegar a 300 ó 400 féminas.

Antes de que termine el año “Manos Descubridoras” pretende llegar a Austria.

Mientras todo lo anterior sucede en el viejo continente, aquí en México vivimos escenarios que son propicios para la aplicación de “Manos Descubridoras”.

No estoy sugiriendo “copiar y pegar” el proyecto “Manos Descubridoras” en México; de lo que se trata es de considerar aquél esfuerzo teutón como un ejemplo digno de estudio y análisis, pero sobre todo como un prototipo con el cual es muy importante vincularse.

De acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) las personas ciegas y débiles visuales rebasan el millón, es decir, hay una amplia población de la cual podrían seleccionarse las mujeres apropiadas para participar en un programa similar a “Manos Descubridoras”.

Conformar en México un programa como “Manos Descubridoras” permitiría ampliar nuestro horizonte de opciones en la detección oportuna del cáncer de mama, sobre todo cuando sabemos que en nuestro país mueren más de 3,500 mujeres por cáncer de mama.

Por supuesto que un programa como “Manos Descubridoras” dotaría de un trabajo digno a las mujeres ciegas seleccionadas.

El sector salud, los Sistemas para el Desarrollo Integral de la Familia en todos sus niveles y los Institutos de Mujeres deben hacer suya la propuesta que aquí planteó de conformar programas que incorporen a mujeres mexicanas en la detección de cáncer de mama.

Dentro del proyecto que se estructure para incorporar a mujeres ciegas en tareas de detección de cáncer deben documentarse y difundirse los casos ya existentes de personas con esta vocación en territorio nacional.

Aunque inicialmente sea necesario traer especialistas o acudir a Alemania para la capacitación de mujeres ciegas y profesionales, con el paso del tiempo las técnicas aprendidas podrían estarse enriqueciendo a partir de los estudios propios.

A principios de año Frank Hoffmann estuvo de visita en España y puntualizó el pensamiento que ha orientado su labor, el cual, muy bien podría servir como punto de partida para el esfuerzo mexicano: “…todo el mundo puede contribuir al bien social. No hay nadie que no pueda hacer nada. La discapacidad no es realmente discapacidad, es capacidad para hacer otras cosas”.

¿Habrá voluntades que se movilicen para que en México contemos con un cuerpo sólido de mujeres ciegas, formadas en la detección de cáncer de mama, que ayuden a salvar vidas?

Abel Pérez Rojas (abelpr5@hotmail.com / @abelpr5 / facebook.com/abelperezrojas) es poeta, comunicador y doctor en Educación Permanente. Dirige Sabersinfin.com. 

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Abel Pérez Rojas

Poeta, comunicador y gestor de espacios de educación. Estudió Derecho (BUAP), Maestría en Formación Permanente y Doctorado en Educación. Ha impartido conferencias y cursos de posgrado en instituciones públicas y privadas. Su obra poética consta de cinco poemarios. Es fundador de Sabersinfin.com.