Como cada año, las tradicionales calaveritas de e-consulta por el Día de Muertos ya están aquí y en esta tercera entrega la calaca dedicó unos versos a prominentes figuras del PAN, PRI y Morena, incluida la mismísima presidenta Claudia Sheinbaum.

LAS CALAVERAS

Las calaveras son juego,
ejercicio del idioma,
en que la muerte se asoma,
y bromea con la palabra,
como una broma macabra;
es verbo con artificio,
se simula el sacrificio,
de los comunes mortales,
riéndonos de nuestros males.
Pero sin duda es relajo,
del ingenio mexicano,
se va buscando un atajo,
“matando” al que está muy sano.

Requiere dedicación,
exige métrica y rima,
son versos con disciplina;
y claro, ritmo o cadencia,
y algo que es como su esencia:
buena dosis de ironía,
burla fina y el relajo,
cual receta de cocina,
un poco de chile y ajo.

CLAUDIA RIVERA VIVANCO
Expresidenta de Puebla

Al terminar su mandato,
se la cargó la huesuda,
y le dijo sin recato:
“no tengo ninguna duda,
que ya gobernaste un rato,
con ocurrencias y daños,
desperdiciaste tres años”.

La mala noticia ahora,
es para la población,
porque la triste señora,
vive una resurrección,
y la sufren los poblanos
¡desde una diputación…!

AUGUSTA VALENTINA DÍAZ DE RIVERA
Presidenta del PAN en Puebla

Va cargando La Catrina,
un costal lleno de huesos,
ahí se lleva a Valentina,
víctima de sus tropiezos.

Los causantes de su muerte,
y que hoy fingen ser dolientes,
fueron los propios panistas,
que cual nido de serpientes,
sólo vieron por su suerte,
dejándola fría e inerte,
sólo enseñando los dientes.

CLAUDIA SHEINBAUM
Presidenta de México

De Palacio Nacional,
en un féretro dorado,
sacaron a la doctora,
al cabo de poco tiempo
del sexenio comenzado.

Claudia, mujer de carácter,
actuó con mucho criterio,
aunque ello no le impidió,
con todo y bastón de mando
habitar el cementerio.

NÉSTOR CAMARILLO MEDINA
Presidente del PRI en Puebla

Desde un origen oscuro,
llegó este esqueleto tierno,
dicen que es de Quecholac,
otros que del mismo averno.

Se cuenta que desde el PRI,
le dio vuelo al gran negocio,
al amparo de Chidiac
y con el diablo de socio.

JORGE ESTEFAN CHIDIAC
Secretario de Educación

Fue exitoso negociante,
seguidor de Alí Babá,
y es fama que en el panteón,
hace gala de tunante,
que compró diputación,
y que hasta vendió el Congreso,
y que sin duda por eso,
por su noble vocación,
la patria muy generosa,
ha premiado su actuación,
y hasta llegó a Educación,
meta que no satisface,
su irrefrenable obsesión,
ser, por encima de todos,
el más rico del panteón.