La última semana de octubre cerró con un saldo de 17 personas que fueron asesinadas en diferentes puntos del estado de Puebla, varios de ellos en la capital poblana por presuntos ajustes de cuentas entre grupos criminales.

El pasado 23 de octubre fue el día más violento de la semana, pues se registraron nueve homicidios en el mismo día, con siete ejecuciones en la junta auxiliar de San Miguel Canoa y dos más en el municipio de Cuautinchán.

Durante la tarde del 23 de octubre, siete hombres fueron acribillados cuando se encontraban en un lugar identificado como un “picadero”, en San Miguel Canoa. La titular de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), Consuelo Cruz Galindo, reconoció que este punto llevaba siete años operando de manera ilícita.

Ese mismo día, dos hombres fueron ejecutados y abandonados en el municipio de Cuautinchán. Los cuerpos estaban con la cabeza cubierta, atados de pies y manos al momento de ser descubiertos a orillas de la carrera a Valsequillo, con un mensaje presuntamente del crimen organizado.

La mañana del 25 de octubre, al menos 10 bolsas negras con restos humanos fueron reportados en inmediaciones del panteón de la junta auxiliar de Chachapa, en el municipio de Amozoc.

Los restos pertenecían a cuatro personas que hasta la fecha no han sido identificadas, además de que tenían un mensaje presuntamente del crimen organizado por la disputa de zonas de narcomenudeo, robo de mercancía y por huachicol, de acuerdo a la Fiscalía General del Estado (FGE).

Asimismo, el martes 31 de octubre, cuatro sujetos fueron asesinados y dos más resultaron heridos producto de un ataque directo con armas de fuego en el mercado Morelos, en la ciudad de Puebla.

Los hechos se registraron por la tarde-noche, cuando civiles y locatarios del mercado escucharon disparos en las oficinas administrativas, donde se atentó contra los sujetos que en su mayoría eran jóvenes de entre 25 a 35 años de edad. (JC)