- Sociedad
Jorge Ramírez desapareció en 2019; FGE Puebla tardó dos meses en entregar cuerpo
La Fiscalía General del Estado (FGE) de Puebla tardó dos meses para entregar el cuerpo de Jorge Ramírez Hernández, desaparecido el 27 de junio de 2019 en Huejotzingo, pues a pesar de que la familia fue notificada en agosto del presente año se tuvieron que realizar dos confrontas genéticas para determinar que el cuerpo correspondía al del occiso.
Desde el Instituto de Derechos Humanos lgnacio Ellacuría, SJ, la Clínica Jurídica Minerva Calderón y el Observatorio de Participación Social y Calidad Democrática, de la Ibero Puebla, expresaron su solidaridad con María Juliana Hernández Moreno y Eladio Ramírez Romero, integrantes del Colectivo Voz de los Desaparecidos Puebla y a su familia, con motivo de la identificación y entrega de su hijo.
Expresamos nuestra solidaridad a María Juliana Hernández y Eladio Ramírez, integrantes del Colectivo Voz de los Desaparecidos Puebla, y a su familia, con motivo de la identificación y entrega de su hijo, Jorge Ramírez, desaparecido en junio de 2019 en Huejotzingo, Puebla. pic.twitter.com/QnYAMqdIYd
— IBERO Puebla (@IberoPuebla) October 26, 2023
Acusan falta de una identificación correcta
La institución señaló que a lo largo de los cuatro años que transcurrieron las autoridades de Puebla nunca realizaron una correcta identificación de las personas encontradas en las fosas clandestinas descubiertas en el municipio de Huejotzingo, en julio de 2019.
Explicaron que la identificación final de Jorge se debió a la segunda confronta genética elaborada por la Fiscalía General de la República, realizada a petición de la familia.
"El pasado 17 de octubre de 2023 se realizó el proceso de exhumación para restituir el cuerpo de Jorge a su familia, quienes lo despidieron y sepultaron en compañía del Colectivo Voz de los Desaparecidos Puebla e integrantes de la IBERO Puebla. Esto sucedió dos meses después de la notificación a la familia de Jorge debido a que las autoridades involucradas retrasaron el proceso de entrega y restitución", expusieron a través de un escrito.
Por lo anterior, la Ibero exhortó a la Fiscalía General del Estado a que cumpla con sus obligaciones en la materia, tales como la creación del Banco Estatal de Datos Forenses y el adecuado funcionamiento del Registro Estatal de Fosas y de Personas Fallecidas y no ldentificadas; así como garantizar la trazabilidad de los procesos forenses de identificación y la debida diligencia de exhumaciones.
"Exigimos a las autoridades involucradas en la investigación, búsqueda e identificación de personas desaparecidas actuar conforme a lo establecido en la Ley de la materia y el Protocolo Homologado de Búsqueda de Personas, garantizando en todo momento la dignidad de las personas desaparecidas y sus familias", finalizó.
El caso de Jorge Ramírez
Jorge Ramírez Hernández, hijo y a la vez papá, tenía 33 años de vida. Unos sujetos encapuchados bajaron de un vehículo en Santa Ana Xalmimilulco y se lo llevaron.
Era 27 de junio de 2019 cuando se reportó su desaparición a la Fiscalía General del Estado. Lo asentado en la carpeta de investigación 12514/2019/Zona Centro indica que esa fecha fue la última vez que se le vio.
Un mes después, se encontró una fosa clandestina con cinco hombres sin vida en Santa María Tianguistengo (Huejotzingo) y a pesar de que los conocidos de Jorge pidieron a las autoridades identificar los cuerpos genéticamente, no lo hicieron.
Desde el momento en que desapareció, don Eladio y doña Juliana no dejaron de exigir a las autoridades hacer todo para encontrarlo. El colectivo Voz de los Desaparecidos en Puebla los acompañó desde entonces para solicitar su búsqueda exhaustiva ante la FGE, en fosas clandestinas en Huejotzingo. (EG).