El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que mantendrá la política energética de no aumentar el precio de las gasolinas, diésel y luz y anunció una serie de medidas con el fin de reforzar el plan anti inflacionario.

Durante su conferencia de prensa matutina el mandatario informó que se reunió con miembros de su gabinete para reforzar el plan anti inflacionario, a quienes ordenó mantener la política de no aumentar los precios de los energéticos.

Destacó que pese a la guerra en Ucrania, el impacto de la inflación en energéticos en México es el más bajo en el mundo, pues es de sólo 0.5 por ciento, mientras que otros países como Estados Unidos tienen 2.5 por ciento.

También señaló que hablará con productores y distribuidores para que sigan ayudando a no aumentar el precio de los alimentos de la canasta básica; así como se quitarán aranceles en productos que estén aumentando de precio y se puedan importar, como la papa y la cebolla.

Finalmente, dio a conocer que prepara una política de tarifas para mantener, y en algunos casos, baje el precio del transporte de mercancías.

Advierten recesión e inflación prolongada en 2023

La calificadora estadounidense Moody’s Analytics advirtió que México podría entrar en recesión para mediados de 2023 y se extendería hasta 2024, causada por una contracción económica en Estados Unidos, mientras que la inflación regresaría a los objetivos del Banxico, hasta 2025.

La firma señaló que la economía mexicana enfrenta eventos desfavorables como la persistencia de choques de oferta en la economía global, altos precios de las materias primas, así como un debilitamiento de la demanda interna ante la necesidad de una mayor restricción monetaria.

Agregó que la producción interna sufre continuas interrupciones por escasez de insumos tanto nacionales como externos; además que la persistente alza de precios internos amenaza con desatar una espiral inflacionaria alimentada por choques de oferta y demanda, así como por el empeoramiento de las expectativas.

En consecuencia, la contracción económica se extendería desde el segundo trimestre hasta el cuarto de 2023, por lo que el Producto Interno Bruto (PIB) se contraería 1.7 por ciento en el próximo año, después de crecer 1.8 por ciento en 2022.

La calificadora con sede en Nueva York recordó que la economía mexicana acumula una contracción de 3.4 por ciento del segundo al cuarto trimestre de 2023, mucho mayor a la caída reportada por la economía estadounidense de 2.1 por ciento.