• Educación

Cuotas escolares sí hacen falta, dicen docentes y padres

  • Brenda Cabello
Las cooperaciones se utilizan para mantenimiento de las escuelas y pago de luz, agua e internet
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Las cuotas escolares son útiles para el mantenimiento de las escuelas pero deben permanecer voluntarias  y no ser condición para la inscripción de los escolares, señalaron docentes y madres de familia.

Mara Morales, maestra en el Bachillerato General Oficial “Pablo González Rivas”, ubicado en San Baltazar Tetela, comentó que por ley será en septiembre cuando se realice la asamblea de asociación de padres en la cual se deben establecer las cooperaciones voluntarias.

Pero no se puede esperar tanto tiempo porque para el 30 de agosto las escuelas deben estar rehabilitadas y contar con gel antibacterial, jabón, material, así como con  pago de agua, luz e internet para iniciar las clases, y todo se paga con el dinero recaudado a través de las cuotas escolares, pues el gobierno no otorgó recursos para este fin.

En algunos casos, las escuelas cuentan con dinero del ciclo escolar pasado, pero en otras, ese dinero fue utilizado para pintar las instalaciones o ampliar las bardas de las escuelas y evitar vandalismo, por lo que se necesitan recursos para cumplir con los requerimientos sanitarios como la desinfección de los espacios cada hora.

El año pasado, la cuota en el bachillerato fue de mil 200 pesos, divida en dos pagos y la estableció la asamblea de padres de familia. Al momento no se ha transparentado para qué se utilizó el dinero recaudado por lo que algunos padres de familia se mostraron inconformes.

David Roldán, maestro de la primaria José María Lafragua, en el centro de la ciudad de Puebla, comentó que las cuotas escolares son legales, de acuerdo con la Ley General de Educación, siempre y cuando el cincuenta por ciento más uno de los padres de familia esté de acuerdo en pagarlas.

El gobierno estatal apoyó este año con la entrega de cloro, jabón y gel antibacterial en la escuela donde él labora, pero las cuotas se utilizan para cubrir gastos como luz, agua, materiales y mantenimiento.

Aunque son voluntarias, las aportaciones son necesarias, en el plantel donde trabaja pues se utilizaron para remodelar los baños y colocar despachadores de jabón.

Consideró que hay padres que no tienen dinero para pagar la cuota debido a la falta de empleo y también hay los que nunca la han pagado y eso no ha sido motivo para negarles la inscripción de sus hijos ni para evidenciarlos.

Viviana López, presidenta del comité de padres de familia del Jardín de Niños Jovito Silva, en la colonia Mayorazgo, comentó que en este plantel no se han cobrado cuotas escolares, pues se está a la espera del regreso a clases presenciales para realizar una asamblea general de padres de familia.

El monto de las cuotas probablemente será acordado en una reunión previa entre la directora de la escuela y el comité de padres de familia para posteriormente proponerla a los papás y mamás.

Serán utilizadas las cuotas para la limpieza de la escuela, pues se encuentra en malas condiciones por estar abandonada durante la pandemia, así como para compra de jabón y gel antibacterial para los niños. En años anteriores fueron usadas para pagar servicios y festivales.

Detalló que en 2019, durante la gestión del comité de padres de familia anterior, hubo una demanda organizada por los padres pues se perdieron 8 mil pesos. Por la pandemia este proceso quedó pausado, sin embargo, retomarán la investigación en este nuevo ciclo escolar.

En el caso del Centro de Atención Infantil (CAI) número 1, ubicado en la Unidad Magisterial México 68, ya se estableció el monto de la cuota para este regreso a clases en mil 300 pesos por niño. Durante la pandemia también se cobró una aportación de 300 pesos, y  ambas cuotas se pagaron de forma voluntaria y fueron establecidas por el comité de padres de familia sin hacer una asamblea general.

Al final de cada ciclo escolar se realizó un ejercicio de rendición de cuentas, donde el comité de padres de familia esclareció que las cuotas se gastaron en el mantenimiento de la institución, de los juegos y áreas comunes y en la compra de pipas de agua potable.

Actualmente se inscribieron entre 180 y 200 niños a este plantel, de los cuales sólo la mitad pagó la cuota escolar.

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