La red de espionaje que creó el exgobernador Rafael Moreno Valle no sólo cubrió a sus adversarios políticos y colaboradores en Puebla, sino también al presidente de la República, Enrique Peña Nieto, así como a los secretarios de estado José Antonio Meade Kuribreña, Luis Videgaray Caso, Miguel Ángel Osorio Chong y Rosario Robles Berlanga.

La lista ampliada de personajes a los que se les realizaron escuchas ilegales la dieron a conocer este lunes el senador del PT-Morena, Luis Miguel Barbosa Huerta y Fernando Manzanilla Prieto, exsecretario General de Gobierno y cuñado del propio Moreno Valle.

Los políticos estuvieron acompañados por Rodolfo Raúl González Vázquez y Anwar Salomón Briseño, quienes colaboraron en este sistema de espionaje.

El primero presentó ya una denuncia ante la Procuraduría General de la República (PGR) en contra de Moreno Valle y el diputado federal Eukid Castañón Herrera, por diversos delitos; mientras que el segundo acusó que existen amenazas en su contra al considerarlo responsable de las filtraciones de las acciones de espionaje.

En julio pasado e-consulta dio a conocer la existencia de la red creada en el sexenio anterior, las direcciones en las que operaba y quienes la encabezaban, así como los métodos que utilizaron, y una primera lista de los personajes vigilados.

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Confirman trama de escuchas ilegales

Al llegar a la gubernatura en 2011, Rafael Moreno Valle consideró indispensable montar una oficina de inteligencia, por lo que se creó el Centro de Análisis y Prospectiva (CAP), bajo la tutela de la Secretaría General de Gobierno (SGG) a cargo de Fernando Manzanilla Prieto.

En 2013, con la salida de Manzanilla Prieto del gobierno estatal, el CAP quedó a cargo de Joaquín Arenal Romero, quien para reestructurar dicho órgano, contrató personal capacitado en labores de inteligencia, investigación, infiltración, cooptación, vigilancia, seguimiento y fotografía clandestina.

A la par de ser responsable del CAP, Arenal Romero organizó una oficina alterna para trabajos de inteligencia, los cuales se tendrían que reportar a Eukid Castañón Herrera, actual diputado federal por el PAN.

Esa oficina se convirtió en una red de espionaje clandestino de tipo telefónico, de infiltración, vigilancia y seguimiento hacia funcionarios públicos, personajes políticos, enemigos de la administración pública y periodistas.

El sistema operaba a través de tres “nidos” o sedes en la ciudad de Puebla desde las que se procesaban los audios y documentos generados por personal que laboró en el Centro de Inteligencia y Seguridad Nacional (CISEN) y que estaban coordinados por Arenal Romero, fallecido en junio pasado.

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Desde Peña Nieto hasta el arzobispo de Puebla

En el listado de personajes a los que se les dio seguimiento aparece el presidente Enrique Peña Nieto, a quien se le interceptaron sus conversaciones por 22 meses, entre el 12 de enero de 2014 y el 16 de noviembre de 2015, según la lista dada a conocer este lunes.

También fueron espiados Luis Videgaray Caso, actual secretario de Relaciones Exteriores, con 2 horas 54 minutos de grabaciones; Miguel Ángel Osorio Chong, secretario de Gobernación, con 2 horas 15 minutos; José Antonio Meade Kuribreña, secretario de Hacienda y Crédito Público, con 3 horas 14 minutos; y Rosario Robles Berlanga, titular de Sedatu, con 8 horas 51 minutos.

La intercepción de llamadas telefónicas también alcanzó a colaboradores de Moreno Valle como el hoy gobernador Antonio Gali Fayad y su hijo Antonio Gali López; el Fiscal Víctor Carrancá Bourget; el ex vocero del gobierno  de Puebla, Javier Lozano Alarcón; el secretario General Gobierno, Diódoro Carrasco Altamirano.

Así como la senadora Patricia Leal Islas; el líder del Congreso, Jorge Aguilar Chedraui y su esposa Isolda Toledano; el alcalde Puebla, Luis Banck Serrato; los diputados locales, Sergio Moreno Valle German y Germán Jiménez García.

También fueron intervenidos los teléfonos de colaboradores del primer círculo del exmandatario, como Marcelo García Almaguer, José Cabalán Macari, los hermanos Roberto y Ángel Trauwitz Echeguren.

Por el lado del PAN aparecen Margarita Zavala Gómez del Campo y Ricardo Anaya Cortés, con quienes disputa la candidatura presidencial; Eduardo Rivera Pérez, el regidor Adán Domínguez y la expanista Ana Teresa Aranda Orozco.

Incluso, la red de espionaje alcanzó al padrino político de Moreno Valle, el ex gobernador Melquiades Morales Flores y su hijo Fernando Morales Martínez; además de los priístas Rogelio Cerda Pérez, Graciela Palomares Ramírez  y el arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa.

Presentan denuncias y advierten levantones

Raúl González Vázquez, ex trabajador del Cisen y del CAP, indicó que el 24 de agosto presentó una denuncia penalcontra Rafael Moreno Valle, Eukid Castañón Herrera y Roberto Rodríguez Acosta –encargado de programas y equipos de espionaje- por los delitos de asociación delictuosa, intervención de comunicaciones privadas, acceso ilícito de sistemas y equipos informáticos y amenazas.

Consideró que las actividades de espionaje que son señaladas a Castañón Herrara y Moreno Valle emulan a un “grupo delincuencial”, ya que incluso han llegado al punto de señalar la “eliminación de objetivos”.

González Vázquez detalló que, a través de Roberto Rodríguez Acosta, se le pidió ubicar a Anwar Salomón Briseño, a Gilberto Sebastián Bravo Romano y a Gerardo Ballesteros, ya que supuestamente, estarían filtrando información de las actividades ilegales.

“Roberto Rodríguez Acosta, me señala que Eukid Castañón y Rafael Moreno Valle están temerosos de qué información pueden tener los medios y qué información presumen que tenga tanto Anwar Salomón como Fernando Manzanilla. Me señala que le tienen que mandar un mensaje siciliano a Fernando Manzanilla y entonces me señala que hay que mandar un mensaje. La cuestión es ubicarlo y levantarlo, primero sacarle qué información tiene y posteriormente, coloquialmente, chingárselo”.

“Cuando estuve en el Cisen formé parte de grupos que ubicaban a personas criminales para ponerlos a merced de la justicia, pero en este caso ya es colocar a ciudadanos en manos de los propios criminales que vienen siendo ellos, porque ya hay indicios de toda esta situación (…) eso es lo que conforma toda esta oficina, ya no es oficina clandestina de espionaje, ya es un grupo delictivo, ya es un grupo que tiene actividades criminales”.

Sin embargo González Vázquez ubicó a Anwar Salomón Briseño y lo puso al tanto de que era perseguido.

Esta persona solicitó entonces a la PGR que se le otorguen las medidas de protección necesarias contra un posibleataque en su contra, y rechazó ser la persona que filtra información a los medios de comunicación sobre los archivos que se generaron del espionaje a políticos locales y nacionales.

“La evidencia muestra que mi vida está en peligro, de acuerdo a las grabaciones, que ya se presentaron en la Procuraduría (PGR) en la denuncia. Suponen el diputado federal y el ex gobernador Rafael Moreno Valle, que yo o el licenciado Fernando Manzanilla tenía información sobre el funcionamiento de estas células, información delicada, y que de alguna manera nosotros la hayamos pasado a ciertos medios para su divulgación, lo cual niego rotunda y categóricamente, pues no hemos tenido información alguna, por lo tanto no he filtrado información que hayan ayudado a estas columnas”.

De acuerdo con los denunciantes, la red de espionaje sigue operando en Puebla, aunque no reporta sus actividades al actual gobernador Antonio Gali Fayad, sino al diputado Eukid Castañón y al ex mandatario.

El senador Luis Miguel Barbosa Huerta consideró que estaba “enfermo” el gobierno de Moreno Valle al llegar a estos niveles de persecución y consideró necesario que Gali Fayad fije una posición al respecto.

Cabe señalar que este lunes, el mandatario sólo expuso de manera breve que las acusaciones del legisladorrepresentan un conjunto de “patrañas”.