Las autoridades diplomáticas mexicanas protestaron por la visión caricaturesca que presenta la ópera Carmen, de la argentina Valentina Carrasco.

La obra se estrenó ayer en Roma, Italia, y la embajada la acusó de ser una burda representación.

La embajada protestó ante la Superintendencia de la Fundación del Teatro de la Opera de Roma, y aseguró que en la visión caricaturesca de México que presenta la ópera Carmen, incluso se planeaba vincular a la Virgen de Guadalupe con la figura conocida como Santa Muerte.

“Se planeaba proyectar una imagen desfigurada de la Virgen de Guadalupe, ligándola al culto de la Santa Muerte”.

La Superintendencia de la Fundación del Teatro de la Opera de Roma decidió modificar el retrato de esta figura central de México.

La embajada mexicana denunció que la productora no cumplió con los acuerdos de reproducir el contexto social del país y que los estereotipos que presenta en la obra no representan a los mexicanos.

En la versión de la ópera Carmen de Valentina Carrasco la historia transcurre en un pueblo de la frontera de México con Estados Unidos.

En la obra, Carmen es una cigarrera mexicana y José un militar que escapa con ella y se dedica al contrabando.

Durante la obra, sobre el escenario desfilan carrozas con la Virgen de Guadalupe y calaveras, y en el acto final se ve una corrida de toros.

Crédito de la foto Valentina Carrasco