- Salud
Cigarrillos electrónicos, alternativa para tabaco
Por sorpresivo que resulte, una investigación científica indica que los cigarros electrónicos son 95% menos dañinos que el tabaco. No se trata de una idea, sino el resultado de un trabajo de la institución gubernamental Salud Pública de Inglaterra (SPI), que apoya a la población de ese país a preservar una vida saludable.
La idea es resultado de un estudio independiente pedido por PSI y trabajado por Ann McNeill y Peter Hajek McNeill (de la Universidad King’s y Queen Mary, de Londres, respectivamente). La conclusión es que los cigarros electrónicos podrían ser una de las razones que han contribuido para que en Inglaterra disminuya el número de fumadores.
El estudio identificó que casi la totalidad de los 2.6 millones de adultos que utilizan cigarros electrónicos en Gran Bretaña son fumadores actuales o ex fumadores y lo hacen principalmente para dejar de fumar o volver a dicha práctica.
Entre las principales conclusiones a las que llegó el estudio, destaca que el uso de cigarros electrónicos (actividad conocida también como vaporizar), emule a fumar tabaco sin los graves daños que implica esta actividad, pues son 95% menos dañinos.
Casi la mitad de la población (44%) desconoce que los cigarros electrónicos son mucho menos dañinos que fumar.
La investigación señala que lamentablemente existe un porcentaje creciente de personas que piensan que los cigarros electrónicos son igual o más dañino que el tabaco:
En 2013 era de 8.1% y en 2015 subió a 22.1%.
El estudio afirmó que hasta el momento no existe evidencia de que el uso de cigarros electrónicos actúe como incentivo a fumar tanto a niños como a no fumadores.
Una conclusión importante a la que llegó el análisis es que el uso de ese tipo de artículos reduce considerablemente (en 99%) los riesgos de que jóvenes y no fumadores se conviertan en usuarios habituales de cigarros de tabaco.
De acuerdo con la experiencia observada, resulta que algunas de las tasas más altas de éxito para dejar de fumar se observan entre fumadores que comienzan a utilizar cigarros electrónicos, al mismo tiempo que reciben apoyo adicional por parte de los servicios locales de asistencia social.