Un dispositivo mecánico externo conocido como exoesqueleto, que incorpora motores y sensores, para aumentar la fuerza y seguridad de un trabajador que recibe el impacto cuando baja una carrocería, en la cadena de ensamblaje de automóviles, es desarrollado por investigadores del  Instituto de Diseño e Innovación Tecnológica (IDIT) de la Universidad Iberoamericana Puebla.

A través del Laboratorio de Manufactura Avanzada de la Ibero Puebla, los investigadores encabezados por Raúl Gutiérrez Estupiñán, trabajan en el desarrollo del exoesqueleto para apoyar a los trabajadores del sector automotriz.

Gutiérrez Estupiñán comentó que, a través del exoesqueleto, el usuario logra una posición más rígida en la columna vertebral para evitar problemas de salud o alguna lesión.

“Con el exoesqueleto, el trabajador puede evitar lesiones o hernias discales; además, obtiene mayor flexión en las piernas, sin que este movimiento implique un impacto severo en sus extremidades”, explicó el académico.

El investigador de la Ibero Puebla destacó que el exoesqueleto pudo desarrollarse en el Laboratorio de Manufactura Avanzada, y es una herramienta que permite ofrecer a los profesionales y estudiantes de ingeniería habilidades para competir en el campo laboral a nivel nacional e internacional.

El exoesqueleto para los trabajadores de la industria automotriz se desarrolló  basado en el uso del software instalado en 50 computadoras, en las se pueden analizar problemas y generar propuestas para mejorar procesos de producción de objetos o sistemas de la industria manufacturera mediante el rediseño o ingeniería inversa.

“Apostamos por la manufactura digital en la optimización de procesos. La ingeniería inversa aplicada a la manufactura permite no solo conocer las características de un producto sino mejorar su diseño. Podemos hacer ingeniería inversa en cualquier cosa, se escanea con ayuda del software, se optimiza, se baja a las máquinas de herramienta y se fabrica. Estas aplicaciones son más utilizadas en las industrias automotriz  y  aeroespacial”, finalizó Gutiérrez Estupiñán.