Los maestros de Oaxaca que mantenían cautivos a 6 agentes estatales de investigación y al vocero de la Secretaría de Seguridad Pública decidieron liberarlos.

Los servidores públicos fueron capturados y retenidos en el marco de las protestas en contra de la reforma educativa.

Las Sección 22 del Sindicato de Trabajadores de la Educación acusó a los policías de haberse infiltrado en su movimiento para obtener información y entregársela al gobierno.

Los maestros les colocaron un cartel con la leyenda: Soy policía y oprimo al pueblo.

La Comisión Política de la Sección 22 le entregó a la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca a los 6 policías y al vocero.

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