El pasado once de febrero de 2014 el Primer Tribunal Colegiado en materia Administrativa resolvió el amparo en revisión 442/2013, mediante el cual vecinos de las colonias del sur de la ciudad, solicitaron modificar la decisión del Juzgado federal Octavo de Distrito por la que previamente había declarado improcedente el recurso de amparo que habían promovido.

El Tribunal federal de última instancia decretó que en ninguna forma puede considerarse como manifiesta la improcedencia del amparo colectivo intentado por los vecinos, por lo que ordenó reponer el procedimiento de amparo, al tiempo que desechó el recurso de revisión adhesiva que se promovió a nombre del gobierno del Estado.

La historia del conflicto legal se remonta 50 años atrás, desde que los campos son utilizados por vecinos como campos deportivos. No existe en 16 colonias a la redonda otro espacio igual. Hace 10 años el entonces alcalde, Luis Paredes, expropió los campos, argumentando como causa de utilidad pública, el acceso al deporte por parte de los vecinos. Sin embargo, al final de su sexenio, el ex gobernador, Mario Marín, decidió revertir la expropiación a favor de los hermanos Miguel Bojalil.

El procedimiento de reversión No fue notificado a ningún vecino, a ninguna liga deportiva de las que organizan competencias en los campos, ni tampoco a ninguna de las escuelas cuyos alumnos. Únicamente se notificó a los beneficiarios, a los Bojalil. Otra irregularidad es que en la reversión de la expropiación, el entonces gobernador jamás consideró que los campos siempre han sido utilizados para actividades deportivas, y solo tomó en cuenta la ausencia de obras con motivo de la expropiación, sin que se hubiese analizado que el predio sí es aprovechado por los beneficiarios.

Inconformes con este abuso, vecinos interpusieron un amparo colectivo, en contra de la reversión y para restituir los efectos de la expropiación. El Juzgado Federal Octavo de Distrito sobreseyó el amparo por considerarlo improcedente; ello en atención a la solicitud de los abogados del actual gobernador Moreno Valle. El juzgado consideró que los amparos colectivos son improcedentes cuando se derivan de un juicio o procedimiento en tribunales. Por la similitud entre un juicio y el procedimiento de reversión, decidió considerar improcedente el amparo colectivo.

Los afectados decidieron solicitar al Primer Tribunal Colegiado en materia Administrativa, la revisión de la improcedencia. El Tribunal decidió dar la razón a los vecinos, a pesar de las peticiones de los abogados del gobernador. Los magistrados federales estimaron que la improcedencia de ninguna manera era manifiesta, por lo que ordenaron reponer el procedimiento y continuar con el amparo de los vecinos.

Como explicó uno de los asesores jurídicos de los vecinos, ahora el Juzgado federal, por mandato de sus superiores, deberá analizar si realmente el derecho colectivo de los vecinos fue vulnerado, o no. Para ello deberá allegarse de las constancias de los expedientes y profundizar en las irregularidades cometidas al revertir la expropiación.