Tres semanas después del primer anuncio sobre su posible cese de funciones, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) destituyó a Sebastián Hernández Orozco, presidente del Comité Directivo Municipal (CDM) de Puebla, por señalamientos de violencia familiar.

En entrevista, el dirigente estatal del tricolor, Néstor Camarillo Medina, informó que la Comisión de Justicia Partidaria del PRI emitió ayer la resolución. En los próximos días se nombrará un delegado con funciones de presidente para no entorpecer al órgano político.

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Señaló que, ante el desacato por evitar separarse del cargo de forma voluntaria mientras se resolvían las investigaciones en su contra como lo solicitó el partido, también se iniciará un proceso de expulsión para que deje de formar parte de las filas del PRI.

Añadió que Sebastián Hernández tendrá 15 días, a partir de que sea notificado, para elaborar su defensa ante la misma comisión; sin embargo, dijo que, de acuerdo con la primera investigación, será complicado que pueda evitar la expulsión, misma se llevará a cabo en un plazo no mayor a un mes.

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También aseguró que el exdirigente municipal nunca dio muestra de conductas violentas o inapropiadas cuando se sumó al tricolor, ya que desde la dirigencia se revisan los perfiles de forma minuciosa, en especial si tendrán un puesto partidista.  

“Lo importante era dejar muestra sólida de que creemos en las mujeres, y que independientemente de lo que resuelvan los tribunales y de quien tenga la razón, el PRI ya les dio la razón a las mujeres”, detalló el dirigente.

No prevén expulsión de Leobardo Soto tras apoyar a Julio Huerta

En un tema similar, señaló que, aunque el priista Leobardo Soto Martínez, líder de la Confederación de Trabajadores de México (CTM) en Puebla, anunció que respaldará la campaña del aspirante a la gubernatura de Morena, Julio Huerta Gómez, no será expulsado del partido.

Comentó que la próxima semana tendrá una última reunión con el líder sindical, aunque reconoció que será complicado que cambie de decisión y rompa los acuerdos con el exsecretario de Gobernación, decisión que no comparte.

Dijo que, como dirigente, no expulsará a nadie, pero resaltó que no detendrá a los priistas que quieran “denunciar su traición y soliciten su baja del partido”, por lo que dará curso a todas las quejas que se inicien, para que la Comisión de Justicia Partidaria del PRI analice el caso.

En tanto, el coordinador de la bancada del PRI en el Congreso de Puebla, Jorge Estefan Chidiac, afirmó que no es la primera vez que Leobardo Soto Martínez muestra su simpatía por personajes ajenos al PRI.  

“Yo le tengo especial afecto a Leobardo. No es la primera vez que lo hace. Ha sido morenovallista, ha sido galista, ha sido barbosista. En el fondo no sé si siga siendo priista. En su momento cuando venga la designación de candidaturas, que vaya viendo por dónde manda a sus candidatos”, comentó Jorge Estefan. Fue así que el PRI destituyó a Sebastián Hernández por acusaciones de violencia familiar.