Ricardo Iker, feminicida de Ingrid Aremis, permanece sin sentencia luego de cuatro años preso, ya que la audiencia para definir su situación fue suspendida esta tarde. Los hechos datan del 12 de mayo del año 2019.

Esta tarde, afuera de las instalaciones de la Casa de Justicia del estado de Puebla, la madre de Ingrid Aremis dio a conocer que la audiencia fue suspendida luego de que Ricardo Iker solicitó la revocación de su defensa.

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Este jueves estaba programada la audiencia en la que se resolvería el destino jurídico de Ricardo Iker, imputado por el feminicidio de Ingrid Aremis, asesinada el 12 de mayo del año 2019. Sin embargo, han pasado casi cuatro años, una pandemia, y el imputado aún no es sentenciado.

Ingrid Aremis fue asesinada presuntamente por Ricardo Iker la noche del 12 de mayo de 2019; habría sido estrangulada. Ella era estudiante de la facultad de Psicología de la BUAP y tenía 20 años de edad; el asesino, 35 años.

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De acuerdo con los testimonios, ambos mantenían una relación sentimental que en su recta final se habría tornado turbulenta dadas las situaciones de acoso que Ingrid Aremis recibía, incluso después de terminado el vínculo. Por ello, la joven interpuso una denuncia, misma que la Unidad de e Atención Especial de Violencia Familiar y Violencia de Género había determinado resolver a través de un pacto amistoso al no haberse encontrado huellas de violencia física.

El pacto amistoso no salvó la vida de Ingrid Aremis, quien después de una noche de fiesta con amigos, fue buscada por Ricardo Iker y ese 12 de mayo la asesinó. Aunque su expareja se entregó de manera voluntaria ante agentes de la Fiscalía General del Estado el 2 de junio del 2019, hasta el día de hoy, no ha recibido sentencia.

La madre de Ingrid asegura que desde hace un año la defensa de Ricardo Iker ha provocado dilación de los juicios por las constantes peticiones. La señora afirma tener mucha paciencia y espera que en algún momento por fin se haga justicia.

Al mismo tiempo reveló que el hecho de trasladarse de Veracruz, estado de donde Ingrid Aremis y toda su familia son procedentes, conlleva muchas dificultades como el hecho de tener que abandonar el empleo o el gasto económico que representa.

Además de que la audiencia del feminicida de Ingrid Aremis fue suspendida, la madre acusa que desde el asesinato de su hija no ha recibido ningún tipo de asesoría de instancias gubernamentales.