Desde hace unos meses los reflectores se colocaron sobre el tenista Novak Djokovic al conocer su postura ante la vacunación por covid-19. El serbio decía que le parecía de “muy mal gusto” preguntar a la gente si se había vacunado o no, ya que es un tema personal y no debería de incumbirle a nadie. A raíz de esto y como parte de los protocolos de salud que implementa Melbourne, una de las ciudades que alberga el Abierto de Australia, el cual está próximo celebrarse, pidió como requisito importante el certificado de vacunación o de otra forma no podrían disputar el torneo.

 La ATP Cup emitió un comunicado oficial para anunciar la baja del serbio Novak Djokovic, número uno del tenis mundial, quien tenía previsto enfrentarse a Roberto Bautista Agut y Pablo Carreño Busta en la tercera jornada del grupo A. Este evento es previo a el Abierto de Australia y la ausencia, aparentemente, es por no saber si Novak se ha vacunado o no. En el caso de no haber obtenido la vacuna su única esperanza para consagrarse en Melbourne será que el gobierno australiano le conceda la exención para poder viajar al país a la que tan sólo pueden aplicar personas que por razones médicas no pueden ser vacunados.

Justamente la tarde del pasado martes corrió el rumor de que la propia organización del Abierto estaba en pláticas con el gobierno de Victoria para “convencerlos” de hacer una excepción y dejar competir a Djokovic, hecho que ha dejado a muchos congelados, pues de lograr el permiso se estaría poniendo en riesgo a la población y al mismo Novak ante covid-19 y no sólo eso, estaría violando de los protocolos que se han impuesto a nivel mundial.

El torneo considera que la ausencia de Djokovic sería una pérdida de gran magnitud para el primer Grand Slam del año, pues este evento es un enorme activo para la economía, el turismo y la imagen del Australia.

La idea no es solo que Djokovic pueda jugar en Australia si no que otros jugadores de los primeros puestos del ranking puedan estar en la cita oceánica mediante esta exención médica que quiere el torneo que se habilite. El problema es que la cuarentena sigue siendo imprescindible para todos aquellos tenistas que no estén vacunados aún incluso contando con una exención médica y el torneo es en casi 20 días.