Luis Barranco arrancó su jornada laboral de manera inusual y poco optimista. Su teléfono sonó tres veces y, tras conocer sus pedidos, fue a entregar los tanques de gas LP que ayudarían a las familias a iniciar el día con un baño o un desayuno caliente.

“Hoy la verdad no fui hacer el recorrido tradicional por mis colonias conocidas, porque en estos días al negocio le estoy poniendo el dinero yo, no hay ganancias, mi familia tiene menos ingresos”, comentó en entrevista.

Desde el 1 de agosto el gobierno federal endureció las inspecciones y la Comisión Reguladora de Energía (CRE) impone topes máximos al precio del gas LP, que esta semana oscilan entre 21.96 y 23.75 pesos por kilogramo.

La medida impide que los pequeños propietarios establezcan sus precios para el margen de ganancias.

Luis Barranco tiene dos décadas en el mercado, su empresa se llama “Gas C” y asegura que este es el peor momento, ya que ni siquiera en el pico más alto de la pandemia de Covid-19 cayeron tanto sus ingresos.

“Nosotros como comisionistas pagamos todo; dar en 20 pesos los kilos por tanque ya no es un cobro, es un regalo. Nosotros tenemos que pagar la operación de las unidades, la gasolina para circular, los impuestos. Para iniciar la semana salimos a la calle, atendemos a los clientes, que han confiado de años en nosotros, sinceramente yo no me llevo nada”, declaró.

Genaro Durán, otro comisionista, comentó que por día las pérdidas corresponden a 500 pesos, recursos que sirven para la circulación de unidades, salarios de operadores y quienes apoyan en la instalación de los tanques.

“La semana estuvimos en las protestas, nuestro paro fue en la empresa Tomza, pero se tuvo que levantar luego, porque nos advirtieron de la llegada de la Guardia Nacional, las detenciones y otros problemas”, agregó.

Hace 25 años tenía 18 unidades circulando y, antes de la regulación, eran 10. Genaro, con actitud pesimista, prevé que “la llave del gas cierre para siempre” en cuestión de meses.

“Todos los días pongo dinero de más, van a venir días en los que no tenga que invertir, ese día ya no vamos a salir, porque ¿con qué?, ¿qué voy a ganar?, ¿cómo pagar?”, expresó.

Tras los topes de la CRE señaló que los distribuidores son observados, y la gente advierte con denunciarlos si no acatan los precios, por lo que aseguró que sí atienden los lineamientos, ya que “hay grandes sanciones”.

Clausuran gasera en Huejotzingo

Este lunes Ricardo Sheffield Padilla, titular de la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO) reportó que una estación de Extra Gas, ubicada en Huejotzingo, Puebla, fue clausurada debido a que no respetó el precio máximo de la CRE y vendió gas a 27.48 pesos por kilo.

La gasera infraccionada está ubicada en la calle Cuatro, número 5, en el parque industrial San Miguel Huejotzingo.

“Las sanciones son muy duras, muchos respetamos, que pagamos impuestos, a los trabajadores, la carburación, las unidades descompuestas. Las medidas fuertes del gobierno deben ser para los que cometen delitos, acciones irregulares, pero esas medidas sí no las vemos”, lamentó Genaro Durán.

No dudó que en próximos días se susciten enfrentamientos entre gaseros que se peleen por los clientes, como el ocurrido este lunes con unos grupos de gaseros que se enfrentaron a golpes en el mercado de la unidad habitacional San Bartolo, en el sur de la ciudad de Puebla.

Afectación mínima a trabajador

Josué Aparicio, empleado de Gas de Oriente, por su parte, señaló que la medida no afecta sus ingresos porque su salario está establecido.

“El problema más grave es para los comisionistas, en mi caso tengo un salario que se respeta”, dijo en una breve entrevista.