El cambio de año fue acompañado de una paradoja. Antaño, se acostumbraba perfilar la candidatura presidencial hacia el quinto año de gobierno y más que campaña, la del PRI era una especie de recorrido para que el “nuevo mesías” fuese arropado por los distintos grupos del partido y acordasen las reglas que regirían en el sexenio entrante. Luego, la presión ciudadana hizo que se legislara para acortar la promoción de las candidaturas, regular el gasto electoral y transparentarlo. La verdad es que la situación deja mucho que desear, pero al menos sí se logró reducir el lapso de las campañas. Hoy parece que no estamos regresando al pasado, sino rebasándolo…

Acaba de terminar el primer año de gobierno de Peña Nieto y los ánimos futuristas parecen desbocarse con las evidentes maniobras de los tecnócratas, en el sector financiero internacional, para apuntalar a Luis Videgaray. Aunque el manejo mediático giró en función de la llamada “reforma hacendaria”, que muchos dudan que sea tal, lo cierto es que lo están catapultando para ser el próximo candidato presidencial. No cabe duda que, desde adentro y desde el exterior del PRI y del gobierno, actúan fuerzas que coinciden en iniciar una sucesión adelantada. Podrán estar confrontadas en otros aspectos, pero no en eso…

Tan fuerte es el forcejeo al interior, que no se percataron que una sucesión adelantada implica lo que estamos viendo: desfondar al Presidente. La forma en que resaltaron al titular de Hacienda prácticamente borró a Peña Nieto del escenario político. Sin embargo, pese a lo aparatoso de los reconocimientos, ni los tecnócratas pudieron eclipsar lo evidente: las distinciones fueron en razón de que se logró la reforma, no de que haya resultados. Esos están pendiente e igualmente sujetos a contradicciones: el año pasado se dijo que los efectos positivos los tendríamos dentro de dos años y ahora nos dicen que será en uno…

Por otra parte, más tardó el Presidente en hacer acto de presencia en Puebla, que don Máximo en meterse en los terrenos del otro. Con motivo de su Tercer Informe, a don Máximo le ha dado por ocupar los espacios de medios de comunicación alineados con el PRI para difundir sus logros. No están “marcando territorio”. Más bien parece que andan moviendo las “marcas fronterizas”: mientras Peña Nieto las empuja hacia dentro de los dominios del poblano, don Máximo hace lo mismo pero en sentido contrario…

El desfondamiento presidencial facilitó el posicionamiento de lo que está ocurriendo en Michoacán. Muy distinto a Puebla, donde se controló el impacto de las explosiones…

“Davós en la mira…”

¿Cuál es la intención con tanto alboroto por el desempeño del Secretario de Hacienda? Al parecer los tecnócratas aumentaron los bonos de Videgaray para presentarlo como el hombre del futuro mexicano, el que está logrando que nuestro país sea propicio para inversiones prometedoras en medio de cierto desaliento global. Es un juego riesgoso, que reduce al gobierno del mexiquense al grado de un sexenio de transición y no sé si la idea será del agrado de Peña Nieto…

Hacia mediados del período de Miguel de la Madrid se vivió algo parecido, cuando se presentó a Carlos Salinas en los escenarios financieros, incluyendo la famosa Comisión Trilateral, para hablarles del futuro de México en los siguientes diez años. Haciendo cuentas, abarcaba lo que quedaba del sexenio de Miguel de la Madrid y el que le seguía. Obvio: todos entendieron que Salinas iba a ser el candidato y que era presentado en para recibir el aval internacional…

El montaje mediático para favorecer a Luis Videgaray fue realizado en la antesala del Foro de Davós y eso nos revela un dato muy importante en el contexto de la sucesión de 2018, hoy adelantada: don Máximo necesita incursionar en esos ámbitos de una manera más decidida. Ha logrado objetivos de buen calado, entre ellos lo de Audi, pero no posee un foro propio. Está a tiempo de organizar uno de talla internacional para la segunda mitad del año o para principios de 2015 y valdría la pena que fuese a Davós…

“En Puebla también sopla el aire…”

Las maniobras de don Máximo nos muestran al menos una parte de su juego. Acaba de concluir una estrategia magistral en el asunto de las diputaciones plurinominales y sacó adelante el espacio del PANAL. Hasta el momento, hemos visto solo una parte de los acuerdos con Peña Nieto para resolver el tema y no faltan los que afirman que del resto nos iremos enterando sobre la marcha. Los que saben dicen que las sorpresas van a seguir, pero nada está asegurado. Lo cierto es que Jorge Aguilar Chedraui debe privilegiar la cohesión al interior de su grupo legislativo y de sus aliados, porque sin duda la fuerza presidencial aprovechará cualquier fisura para imponer sus condiciones…

Don Máximo ha ido estructurando una serie de ejes para impulsar su proyecto rumbo a Los Pinos y regir la sucesión local. No se trata de un simple sistema de poder basado en pesos y contrapesos, sino de elementos verticales y horizontales con la intención de mantener a resguardo su estrategia final…

De un lado, pone en manos de Micalco y de Pablo Rodríguez el control cupular del PAN, pero entrega el manejo de las estructuras al eje Eukid-Gordillo. El dominio que ejerce Eukid a través de Néstor está más fuerte que nunca. En este sentido, Pablo desarrolla una estrategia muy interesante: actúa como si tuviese contrincante. Quiere llegar con el mayor respaldo y consenso posible en la Capital, mas no como resultado de una simple ratificación de candidato único…

Si con el relevo en la alcaldía capitalina se entrará de lleno a superar el conflicto con don Máximo, Pablo tendrá que lograr algo similar desde el Comité Municipal panista. Será clave apoyarse en gente moderada con la intención de desmontar el escenario de polarización existente y de paso crearse un espacio propio. Quizá por eso dice que valora dedicarse sólo al partido…

En lo que va de la gubernatura, ha tenido lugar una intensa polémica entre los panistas sobre cuál es la estrategia correcta: la del alcalde saliente, la de Pablo Rodríguez o la de Franco. Por los motivos obvios, hoy el lugar central lo ocupan los dos últimos. Así como Pablo se encamina a desmontar el conflicto panista, Franco confirma que lo suyo es el ámbito ciudadano. Está claro que “le funciona la ardilla” porque con eso anula las posibilidades de un conflicto con don Máximo, además de que respaldó a Aguilar Chedraui para coordinar a los legisladores…

Asimismo, liderar un gobierno de distensión hará crecer los bonos de Toni Gali, algo que podría pesar mucho en su momento…

A su vez, el eje Eukid-Aguilar Chedraui lleva a la consolidación del primero como un hombre muy poderoso y abre expectativas de mayor envergadura para el segundo. ¿Para cuánto les va a alcanzar? Es difícil precisarlo y es interesante el forcejeo entre Eukid y Micalco, a propósito del informe del presidente estatal, disputándose el crédito por los resultados electorales de 2013…

Este es el escenario montado por don Máximo para cuando haga su jugada final de la gubernatura sexenal y vaya camino a la Presidencia. Es la cara oculta de la luna…

Mientras tanto, sigue la trifulca panista por la presidencia del CEN. De no haber salida a la ruptura entre Madero y Cordero, podrían crecer las posibilidades de Oliva y Peña Nieto maniobra a favor del rompimiento…

Hasta entonces…

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