Por el planeta: implicaciones para cumplimiento de T-MEC

  • Javier Cobos Fernández
El pasado viernes Estados Unidos logró una propuesta presidencial sin precedentes

Corría el año de 1969 cuando el entonces consejero del presidente Richard Nixon, Daniel Patrick Moynihan escribió una alerta por los efectos que tendrían las emisiones de CO2 a la atmósfera como consecuencia de la utilización de combustibles fósiles como principal suministro energético.

Más de cincuenta años después se logró un paso sin precedentes para la efectiva reducción de gases contaminantes causantes del calentamiento global y las, hoy, muy conocidas repercusiones materializadas en fenómenos meteorológicos extremos.

Ciertamente, el triunfo en el Senado norteamericano el domingo 7 de agosto, de la iniciativa demócrata, y el triunfo en la Cámara de Representantes el viernes pasado, no sólo otorga un mayor margen de negociación para Joe Biden en las próximas elecciones intermedias, sino que sienta un precedente de apoyos económicos y cambio de ruta para el impulso de energías limpias y la disminución de los efectos del calentamiento global.

Podría citar un sinnúmero de características que la iniciativa de más de 370 mil millones de dólares, los incentivos fiscales a los ciudadanos que compren vehículos eléctricos nuevos y usados, o aquellos incentivos a la producción de energía solar, y eólica, entre otros.

Si bien el viernes pasado marcó un parteaguas en la política ambiental mundial, no podemos dejar de ver las implicaciones en términos de poder de negociación de las empresas estadounidenses que han interpuesto quejas por violaciones al T-MEC y la incertidumbre jurídica que impera en la política energética mexicana.

Esto es, si el triunfo demócrata a favor de la generación de energías limpias representa una ampliación de margen de negociación local para el presidente Biden. No deja de ser importante la repercusión que este margen de negociación tiene sobre el cumplimento de tratados internacionales con nuestro país en materia de cambio climático. A alguien en Palacio Nacional le dio chorrillo sin duda.

Para pronto. No podemos olvidar que las discusiones sobre sendos incumplimientos por parte de nuestro país al T-MEC continúan debatiéndose y la semana pasada los empresarios norteamericanos, además de los congresistas en la cámara baja, lograron un paso adelante para la negociación en materia de inversiones en materia de generación de energías limpias en nuestro país. Lo estoy escribiendo hoy y usted verá en las próximas semanas señales del fortalecimiento de dicho poder de negociación. Como dicen nuestros amigos “wait and see”.

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Javier Cobos Fernández

Economista por la UDLAP y maestro en Administración Pública por la Universidad de Columbia de Nueva York, con estudios de Maestría en Derecho en el ITAM. Investigador y consultor en análisis económico, transición energética, ESG e ingeniería legislativa en COBOS&ASSOCIATES.COM,