Lamentos del lobo en México

  • Rodrigo Rosales Escalona
Para el pueblo sortear caminos de lodo le es complicado por alimañas en su contra

“Se pueden y se deben, naturalmente, impugnar los monopolios e instituciones semejantes, ya que es indudable que empeoran la situación del trabajador.”
Lenin

A nivel mundial el proceso de degradación del pensamiento político e ideológico es parte de las aspiraciones del capitalismo salvaje desde los sesenta para enfrentar al “comunismo” socialista de la ex URSS, de China y Cuba, en cuanto a que los movimientos sociales iniciaron reforzando sus reivindicaciones de justicia laboral y de derechos por parte de dicho capitalismo.

Sea el pensamiento comunista o de izquierda existente, lo cierto es la presión y represión ejercida por el capital en el mundo, sobre todo en naciones subdesarrolladas donde la política imperialista se encuentra en contubernio a capitales criollos, su interés es la plusvalía absoluta, saqueo de las riquezas naturales, la precariedad de la clase trabajadora en general, y sobre todo, limitar o impedir que los sindicatos fortalecieran sus derechos de la clase trabajadora.

El capitalismo no podía quedar satisfecho hasta ir conformando un modelo económico y político de mayor envergadura que cobijara mejor sus objetivos, siendo a partir de los setenta que diseñan el neoliberalismo para, supuestamente, motivar el desarrollo mundial fincado en la preponderancia del capital privado sobre el Estado, es decir, restarle funciones para la administración privada, abarcando mermar derechos sociales, educativos, salud y etcétera, donde la sociedad saldría beneficiada.

El resultado es conocido: crisis y pérdida de garantías sociales como de soberanía, entre ello, el factor educativo, cultural, identidad y memoria social e histórica. Despojar de dichos valores nacionales a un pueblo para sujetarlo y alienarlo, con el fin de que el esquema individualista sea la marca de la de la planeación estratégica, donde los jóvenes emprendan un liderazgo y dirección de competencia, sin una identidad grupal ni conciencia alguna.

Entre ese proceso abarca la fragmentación y disolución de ideología de los partidos políticos, para que estos solamente sean justificantes y feroces defensores del neoliberalismo, tal como ocurre en México a partir de Carlos Salinas de Gortari, quien los convierte en sus “aliados cómplices” de sujeción social para los fines determinados de dicho modelo. Vamos, el alcance mayor fue y es, en ambas cámaras legislativas donde voces no son las del pueblo porque representan intereses económicos distantes a la nación.

Es así que el ensayo parte con el PRI y PAN, quienes actúan para garantizar dicho modelo desde los aparatos legislativos. Desdeñando las voces de luchas sociales que actúan en organismos afines; el sistema comprende que las movilizaciones reivindicativas crecen ante la represión y exclusión o merma de derechos todos; es momento de la represión general, además de desactivar organizaciones sociales y partidistas del pueblo.

La tarea se cumple al pie de la letra costando vidas, desapariciones forzadas y cárcel. ¿Y el derecho y la Constitución? Como el poder lo puede todo, los reclamos son ignorados, así como la justificación de que el “desarrollo” lo es todo.

“La cultura, cuya pérdida deplora, no es para la inmensa mayoría de los hombres más que el adiestramiento que los transforma en máquinas.”
Marx y Engels en El Manifiesto del Partido Comunista

La política deja de existir como tal, para dar paso a lo que Salinas impregnó de “pragmatismo” que hace de la política, ideología y lenguaje, un híbrido sin identidad alguna con el origen de dichos partidos políticos; es decir, permanecen sus siglas, se conservan estatutos como justificación de que se cuentan planteamientos para enamorar al público y crear una pertenencia falsa. Es el modelo pragmático que engulle al PRI, PAN y luego al PRD.

Es así como permanecen y amplían su injerencia, donde ese Estado tecnócrata con la oligarquía económica y financiera se montan en lo que ellos llaman “democracia”, para cautivar a la sociedad de que velan por todos. Sin embargo, para poder penetrar y alienar mejor, los poderes fácticos se perfeccionan a través de los aparatos Ideológicos formales e informales, es decir, desde educativo, medios de comunicación, clero y los pragmáticos partidos políticos. El objetivo es claro y contundente en cuanto a que se trata de una formación social específica, cuya función sea justificar y preservar el orden material de las distintas formaciones económicas-sociales. Estas segregan su propia ideología jurídica, para justificar políticamente con un lenguaje causístico y manipulador el derecho a la propiedad privada en extensión, o los derechos provenientes de las “castas divinas criollas”.

Esa ideología capitalista renovada con la neoliberal ejerce un papel encubridor y justificador de intereses materiales basados en la desigualdad social, misma que se le impedirá poner al descubierto la verdadera estructura de las relaciones sociales y las profundas desigualdades que enfrentan; es decir, impedir que el razonamiento y reflexión lógico del ser social, no alcancen dicha dimensión crítica. Hemos llegado a la famosa Tesis XI de Feuerbach: "Los filósofos se han limitado a interpretar el mundo de distintos modos; de lo que se trata es de transformarlo."

El Manifiesto del Partido Comunista es un documento teórico y práctico que explica y fundamenta la praxis revolucionaria, trazando fines, estrategias, tácticas y críticas a las falsas concepciones sobre el socialismo y el comunismo. Marx ilustra las contradicciones entre fuerzas y relaciones productivas que generaron la Revolución Capitalista: la lucha de clases como respuesta a la violencia u opresión que ejerce la clase dominante contra otras y sus fracciones, en suma, en el Manifiesto del Partido Comunista tenemos un caso ilustrativo del marxismo como teoría de la praxis revolucionaria o cambio radical del mundo.

No se tome "ideología" en la acepción estrecha de falsa conciencia, sino como una toma de posición clasista de carácter cognoscitivo. En La ideología de la neutralidad ideológica en las ciencias sociales, Sánchez Vázquez sostiene que, en tanto ideología, las ciencias sociales se destinan al desarrollo, mantenimiento y reproducción de las relaciones sociales de producción, o a su destrucción: son terrenos de posturas opuestas. Sin embargo, de "que una ideología puede ser una conciencia falsa, no toda conciencia falsa de por sí es ideología" (Sánchez Vázquez, 2003: 275). El conocimiento no es sinónimo de imparcialidad, sino de teorías fundamentadas en razones, comprobables, que incluyen pero no se reducen a una mera conciencia clasista; el ejemplo paradigmático al respecto es la explicación marxista de la plusvalía.

Las luchas o conflictos excluyentes no llegan a la destrucción del contrario, sino que lo dominan para que se subestime. La servidumbre del esclavo u oprimido, afianzada mediante prédicas manipuladoras, logran que se identifique con el amo; que asimile y haga suyas las ideas que mantienen su explotación: es un alienado que estabiliza el poder de dominio (también el dominio utiliza el terror); pero la sumisión externa no siempre significa espíritu de esclavitud.

Por mantener su afán de poder, la burocracia se divorcia de las necesidades que supuestamente debe cubrir. Su actual forma de actuar, heredada de procesos anteriores, congela o mata la creativa vida social: el cuerpo de funcionarios del Estado, la cultura, la educación y de la salud degradan la capacidad creativa del ser humano mediante formulismos inútiles, contrarios a la aventura revolucionaria.

“Las ideas dominantes no son otra cosa que la expresión ideal de las relaciones dominantes; las mismas relaciones materiales dominantes concebidas como ideas; por tanto, las relaciones que también las que confieren el papel dominante son ideas”.
Marx y Engels

Ante ello, el proceso de degradación de la nación política e ideológica, con consecuencias en el pensamiento social, le restaron cierta capacidad de replantearse hacia qué rumbo tomar frente a esos embates tecnocráticos, porque las “leyes” están secuestradas, como también cuál es el objetivo de la democracia que no les pertenece.

La acumulación de la violencia de ese Estado oligarca tecnócrata deriva en protesta permanente, misma que los aparatos de represión del Estado ejercieron su papel de contención y disuasión. Empero, esa sociedad “contenida” jamás estuvo paralizada, al contrario, en cada uno de los seis sexenios neoliberales estuvieron presentes en protesta, hasta que unificaron resentimientos y hartazgo para convertirlo en una sola voz y voluntad electoral para impedir la permanencia neoliberal en 2018.

No conformes de ser despojados del poder la tecnocracia y oligarquía, emprenden campañas de guerra sucia mediante el poder fáctico y medios masivos de comunicación que expresan esos sentimientos de amargura, con todo y pruebas de que ejercieron corrupción con total impunidad.

Entre esos organismos resaltan cabezas como Claudio X. González, Gustavo de Hoyos, con sus aparatos de Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad, más otros que se dicen luchar por la “democracia”, que diseñan un órgano político en la Triada PRIAND, como cabeza de puente para sus fines de combatir la voluntad popular y al presidente Andrés Manuel López Obrador. Incluso, las estrategias de unificar algunas plumas orgánicas como Enrique Krauze, Héctor Aguilar Camín, y quienes ocupan medios impresos, radiofónicos y de televisión, son el coro de sirenas que se conjuntan con aparatos ultraconservadores como FRENAA, cuya cabeza es Gilberto Lozano quien tuvo como aliado a Pedro Ferríz de Con, pero, según ahora Pedro, Gilberto ya no le es suficiente y vocifera su ruptura con FRENAA, a lo que Gilberto lo evidencia junto con Claudio X. González de ineptos.

La trama y crisis a la que se enfrentan esa oposición, deriva de ellos mismos que jamás dimensionan el por qué fueron desechados por el pueblo, por más que vociferan que se conduce a la nación al abismo “comunista”, sin que sepan su significado real, en cuanto a que solamente se pretende aplicar la Constitución al reclamo social a secas.

Cuando falla la organización se suele echar la culpa a la ideología”. Lenin

En cuanto a Morena, nace de ese reclamo social que se identificó con una persona que habla, expresa y ve con los mismos sentimientos sociales de reclamar y buscar que esos reclamos cobren cuerpo sin menoscabo de sus demandas y que la Constitución cobre sentido real.

El problema radica en que no ha madurado Morena como partido, sin que agregue la voz social en la estructura, como tampoco los profundos sentimientos de ir encontrándose es esa aspiración de justicia, porque a la sociedad le queda claro que fue despojada del valor nacional, de que el imperio de la corrupción los sumergió en la obscuridad, siendo que es ella quien inició una nueva etapa política.

Como dijo Lenin, esa “organización” de cúpula no dimensiona a fondo que es el pueblo quien le imprime valor a la lucha, tal como AMLO lo sentenció recientemente: “La libertad no se implora, se conquista”. Somete a juicio el proceder de no ubicar el papel histórico social y de que depende de ese juicio de valor un proceso soberano y equitativo en construcción,

Una cosa es dirigir y otra el liderazgo que emana del aprendizaje en la lucha social y sus procesos históricos venciendo obstáculos de toda índole, anteponiendo físico contra represión. A diferencia de quienes se encumbran cómodamente argumentando que son los originales de Morena, en los hechos, se agregan al clamor social, tal como Ricardo Monreal, quien se dice que lo excluyen del proceso de selección en el juego presidencial, pero, por sus actos se le conoce como su plática con el exgobernador de Michoacán por el PRD, Silvano Aureoles, mismo que es acusado de fraude por más de 5 mil millones de pesos mientras fue gobernador de Michoacán, y que está acusado e investigado por distintos delitos –desde peculado hasta lavado de dinero–, reapareció públicamente hoy a través de una fotografía que publicó en su cuenta de Twitter. En ella posan sonrientes ambos, con el senador Ricardo Monreal, de Morena.

Silvano Aureoles acompañó una foto con Ricardo Monreal en la que dice: “Para lograr coincidencias que recuperen la grandeza de nuestro #México, deben dejarse filias y fobias. El proyecto de nación será superior, esta es la gran coincidencia con @RicardoMonrealA”.

La fotografía difundida por Aureoles no dice cuándo fue tomada, si es del día de hoy o si es de un encuentro anterior.

Monreal, a su vez, es considerado distante del presidente López Obrador. Llevan sin dirigirse la palabra al menos un año. Él afirma que dentro de su partido Morena no hay piso parejo para la contienda presidencial, es decir, que hay una operación de Estado para beneficiar a alguno de los precandidatos, en este caso Claudia Sheinbaum.

El Senador “rebelde” además ha dado muestras públicas de acercamientos con fuerzas de oposición, como lo ha hecho en el pasado justo antes de elecciones internas. Algunos opinan que está preparando su salida de Morena y otros que simplemente es una manera de operar para obtener beneficios políticos.

Aureoles que es afín al modelo de Claudio X. González y a la Triada PRIAN, siendo Monreal quien sabe perfectamente que es parte del entramado de una oposición que navega en el desierto como víbora. He ahí que los minutos de ese pueblo se mantienen marcando la hora; únicamente es cuestión de que las cúpulas se enteren.

“La crítica tiene que limitarse a comparar y contrastar un hecho no con la idea, sino con otro hecho”.
Lenin

Fuentes
Manifiesto del Partido Comunista de Carlos Marx y Federico Engels
Marx & F. Engels. La ideología alemana. Montevideo: Pueblos Unidos, 1959. Trad. al castellano de W. Roces
González, Juliana, Carlos Pereyra y Gabriel Vargas (comps.) (1986). Praxis y filosofía. Ensayos en homenaje a Adolfo Sánchez Vázquez. México: Grijalbo
Sánchez Vázquez, Adolfo (2003). A tiempo y a destiempo. Antología de ensayos, prólogo de Ramón Xirau. México: Fondo de Cultura Económica
Ensayos de marxistas sobre historia y política. México: Océano, 1985
Filosofía de la praxis, 2ª ed. México: Grijalbo (Teoría y Praxis, 55). (La última edición es del Fondo de Cultura Económica, 2003)
Shapiro, Ian. Los fundamentos morales de la política. El Colegio de México, 2007
Dahl, Robert, Los dilemas del pluralismo democrático, Alianza Editorial. México. 1991
Duverger. Maurice, Sociología de la política. Ed. Ariel. México, 2003
Bobbio. Norberto. El futuro de la democracia. Fondo de Cultura Económica. 2008

rodrigo.ivan@yahoo.com.mx

 

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Rodrigo Rosales Escalona

Periodista y analista político en medios locales y nacional, filósofo, docente en nivel superior, activista social, comprometido con la justicia.