Crónica de una cuarta ola anunciada

  • Araceli Molina Diz
Como sociedad nos hemos acostumbrado a minimizar el riesgo del contagio y permanecer indolentes

Y como ya se venía advirtiendo a nivel internacional, ha llegado la cuarta ola de contagios por la variante Ómicron a nuestro país. Vemos el crecimiento constante de contagios por Covid-19 e incluso el presidente Andrés Manuel López Obrador, el día lunes anunció que dio positivo al virus por segunda vez.

Esta variante ha acelerado la propagación de la enfermedad de forma preocupante; sin embargo, 19 estados del país siguen con semáforo en verde, incluido Puebla, y las medidas aplicadas por los gobiernos son mínimas.

Creo que como sociedad nos hemos acostumbrado a vivir en pandemia, a minimizar el riesgo que implican los contagios y preferimos permanecer inconscientes e indolentes ante el riesgo que estamos viviendo como humanidad.  Incluso el Presidente, teniendo evidentes síntomas de un posible contagio, acudió a la mañanera ante los periodistas y restando importancia con el argumento de muchos: “yo creo que es gripa”.

A esta indiferencia sumamos, el vía crucis que han vivido muchos trabajadores para obtener una incapacidad laboral por Covid-19, lo cual, me parece irreal e increíble; burocracia en medio de una pandemia. Esto me remite a una sátira del fin del mundo, una película de Netflix “No mires arriba”, en la que se representa la falta de conciencia que hemos desarrollado como humanidad para no estar presentes, para minimizar lo realmente importante y para no sentir; y es que parece chiste, pero es anécdota.

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Araceli Molina Diz
Coautora del libro “La Campaña”, Guía para Estructurar Candidaturas; creadora del podcast Política en Femenino. Consultora con experiencia en políticas, gestión y administración públicas, comunicación política y perspectiva de género.