Las elecciones intermedias siempre se han tomado a la ligera, al no ser una elección en la que se vote por la figura presidencial, el electorado no necesariamente muestra interés, ni participa como lo hace cada 6 años.

Sin embargo, los acontecimientos vividos en los últimos días, nos deben hacer reflexionar sobre la importancia de crear pesos y contrapesos en el Congreso de la Unión. 

La declaración por parte del presidente Andrés Manuel López Obrador de proponer una reforma para la renovación del consejo general del INE, en razón de las sanciones en este proceso electoral a MORENA; la inconstitucionalidad de la aprobación por parte del Senado, orquestada por Ricardo Monreal, Coordinador de la bancada de Morena, de alargar por dos años más el periodo del ministro Arturo Zaldívar como presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, es decir, saldrá hasta el 2024 junto con el presidente López Obrador; son un claro antecedente del rumbo hacia cambio presidencial en 2024.  

En la próxima elección hay mucho en juego, no podemos darle más poder al poder porque este camino nos puede llevar, tenemos varios ejemplos en Sudamérica, a una peligrosa dictadura disfrazada de transformación. 

 Después de que en 2018 Morena tuviera un triunfo arrollador, se generó un desequilibrio del poder en México, por ello, el próximo 6 de junio, tenemos la gran oportunidad de retomar el camino de la democracia.  

Esta en disputa poner mayor contrapeso al ejecutivo de la nación, lo cual, es satanizado por el presidente y el partido en el poder ya que justifican que es un freno a la “cuarta transformación”, sin embargo, todo proyecto para llegar a buen término, debe ser evaluado, tener contrapesos, equilibrios; en democracia es fundamental la diversidad de posturas y el pensamiento crítico, que permitan ampliar la visión que tienen unos cuantos. 

Contar con el control total y tener todo el poder, nunca ha sido un camino que conduzca al bienestar de todos y todas.  

Es nuestra obligación como ciudadanos informarnos, ir más allá de fanatismos o adoctrinamientos y reflexionar, la división de poderes, los órganos autónomos y la sociedad civil organizada, son entidades que sirven de contrapeso al poder, al Poder Ejecutivo en específico. Ellos deben ser quienes salvaguarden los derechos de las y los mexicanos ante el ejercicio del poder.

Defender y fortalecer nuestras instituciones, es defender la democracia, ya que estamos hablando de la capacidad que tenemos los ciudadanos de controlar las decisiones de los políticos e influir en su comportamiento.