Robert Lansing presente

  • Rodrigo Rosales Escalona
La oligarquía combate la postura del presidente por la Reforma Energética

En estos momentos críticos para el presente en México, la pugna por el poder, deriva en crisis política como legal, porque si el postulado supuesto se debe respetar y hacer valer la democracia, en los hechos, queda en entredicho, por las ambiciones de la riqueza nacional.

 

“Los déspotas aborrecen la luz de la verdad”

Benito Juárez

 

Para dejar en claro el proceso de cómo la oligarquía, cleptocracia y opinocracia, combaten en cada espacio la postura de la presidencia de la república por reorientar y darle definición a la “Reforma Energética”, donde el único beneficiado sea la nación y pueblo, se teje una serie de opinocracia primitiva y servil, hacia desvirtuar y ocultar recién pasado de cómo se fue “reformando” la Constitución en los artículos 24, 25 y 27, más 29 transitorios, desde Carlos Salinas de Gortari hasta Enrique Peña Nieto, por enfatizar expresiones agresivas, difamatorias y de sembrar falsas noticias.

El cómo y por qué la tecnocracia neoliberal se asume como demócrata y poseedora de la moral, siendo que sus pasos y hechos rinden cuantas de la perversidad con la que han actuado, luchando por reinventarse acusando a la actual administración de conducirse de manera inconstitucional.

La memoria histórica impide olvidar como recalcar que entre su camino, todo está, solamente falta detectar e identificar los momentos cruciales donde las traiciones e injusticias dieron paso a emponderar a falsos moralistas del poder cualquiera.

Recurriendo a la historia para ir aclarando y valorando cómo desde la tecnocracia, su destino ya había sido planeado por el poder norteamericano.

Luego del golpe de Estado de Victoriano Huerta contra Francisco Madero y su ejecución, Huerta procuró allegarse de más recursos a través del cambio de bonos de su antiguo y extinto gobierno. Se presentaba en diversas cortes estadounidenses en nombre del gobierno mexicano e intentaba recuperar municiones decomisadas por EUA en los tiempos de su mandato.

En respuesta a esto, el recién designado secretario de Estado, Robert Lansing, respondió favorablemente a la solicitud de la facción carrancista de emitir un documento donde se asentara que el gobierno de EUA nunca había reconocido al de Victoriano Huerta. Esta declaración serviría a los constitucionalistas para combatir las solicitudes de Huerta. Así, Washington mostraba mayor co-operación con Venustiano Carranza al imprimir un giro a su estrategia de política exterior e inclinarse por reconocer a una facción en México.Woodrow Wilson ya sabía del pacto entre Alemania y Huerta en mayo de 1915. Veía la pacificación y el establecimiento de un gobierno sólido en México como una necesidad ante la amenaza teutona de aprovechar la inestabilidad en nuestro país y crear una alianza en contra de EUA. Paralelamente, el “cuerpo diplomático” de Carranza en EUA se esforzaba en obtener el reconocimiento.

Así mismo, la política norteamericana no conforme con el desarrollo y conflicto entre las fuerzas revolucionarias y de Carranza, que tendían a formar un sentimiento nacionalista e independiente a la nación, sobre todo, con el artículo 27 en hacer valer la soberanía petrolera, chocó con los intereses imperialistas norteamericanos, por lo que se apresuran a diseñar el futuro dominante contra México: el cómo, leamos a Robert Lansing:

México es un país extraordinario, fácil de dominar porque basta con controlar un sólo hombre: el presidente. Tenemos que abandonar la idea de poner en la presidencia a un ciudadano americano ya que esto llevaría otra vez a la guerra.

La solución necesita más tiempo: debemos abrir a los jóvenes mexicanos ambiciosos las puertas de nuestras universidades y hacer el esfuerzo de educarlos en el modo de vida americano, en nuestros valores y el respeto al liderazgo de Estados Unidos.

Con el tiempo esos jóvenes llegarán a ocupar cargos importantes, finalmente se adueñarán de la presidencia; entonces, sin necesidad de que Estados Unidos gaste un centavo o dispare un tiro, harán lo que queramos.

Y lo harán mejor y más radicalmente que nosotros.

 

“Los lobos no se muerden, se respetan”

B. Juárez

Ante el aniversario de la Expropiación Petrolera Mexicana, donde la secretaria de Energía, Rocío Nahle García, en Twitter expresó la importancia de la “hazaña” histórica para la nación. La periodista Yuriria Sierra, intenta corregir a la secretaria, escribiendo: “¿Sí sabes, secretaria que Cárdenas nacionalizó el petróleo a petición de EU para evitar que le vendiéramos a los nazis?

Ay nomás, para que no te hagas bolas con las verdaderas razones detrás de la “hazaña soberana y patriotera”...

Yuriria se hizo viral, calificándola de ignorante o ser parte de la fauna de “intelectuales” orgánicos, como una persona le revira que jamás había escuchado de tal explicación: “Ah chirrión. Esta clase de historia me la salté jaja no había escuchado jamás”. escribió.

 

La Constitución de 1917, se supone que garantiza los derechos del pueblo mexicano, así como soberanía, hasta que con la presidencia de Lázaro Cárdenas, la Constitución, no había cumplido con su objetivo soberano, inicialmente, mediante un Decreto, promueve la nacionalización del petróleo el 18 de marzo de 1938. la postura del general Cárdenas provocó malestar entre los países extranjeros y sus compañías petroleras en México, en cuanto a que el petróleo del subsuelo fue considerado desde un principio como propiedad de la Nación, dando principio a la aplicación del párrafo IV del artículo 27, derivando que los acuerdos de Bucareli y el de Calles-Morrow quedaron anulados.

Partamos al fragmento del discurso del general Cárdenas:

Las compañías petroleras, no obstante la actitud de serenidad del Gobierno […] se han obstinado en hacer, fuera y dentro del país, una campaña sorda y hábil […] que han dado el resultado que las mismas compañías buscaron: lesionar seriamente los intereses económicos de la nación, pretendiendo por este medio hacer nulas las determinaciones legales dictadas por las autoridades mexicanas. 

Y en esta situación de suyo delicada, el Poder Público se vería asediado por los intereses sociales de la nación que sería la más afectada, pues una producción insuficiente de combustible para las diversas actividades del país […] tendría que ocasionar, en breve tiempo, una situación de crisis incompatible no solo con nuestro progreso, sino con la paz misma de la nación […] y la existencia del propio Gobierno se pondría en grave peligro, pues perdido el poder económico por parte del Estado, se perdería asimismo el poder político produciéndose el caos. 

Otra contingencia, forzosa del arraigo de la industria petrolera, fuertemente caracterizada por sus tendencias antisociales, y más dañosa que todas las enumeradas anteriormente, ha sido la persistente, aunque indebida intervención de las empresas en la política nacional. 

Han tenido dinero […] para la prensa antipatriótica que las defiende […] Pero para el progreso del país, para encontrar el equilibrio mediante una justa compensación del trabajo, para el fomento de la higiene en donde ellas mismas operan […] no hay dinero, ni posibilidades económicas, ni voluntad para extraerlo del volumen mismo de sus ganancias

Tampoco lo hay para reconocer una responsabilidad que una sentencia les define, pues juzgan que su poder económico y su orgullo les escuda contra la dignidad y la soberanía de una nación que les ha entregado con largueza sus cuantiosos recursos naturales y que no puede obtener, mediante medidas legales, la satisfacción de las más rudimentarias obligaciones

[…] Planteada así la única solución que tiene este problema, pido a la nación entera un respaldo moral y material suficiente para llevar a cabo una resolución tan justificada, tan trascendente y tan indispensable

 

“La voluntad vence obstáculos. El patriotismo opera milagros”.

C. Juárez

 

Como respuesta a la responsabilidad nacional y social del cardenismo, luego de la Guerra Cristera, emerge el Partido de Acción Nacional, como “oposición” que “exige” democracia. Sin embargo, bajo cobertura de diversos organismos de ultraderecha, se mantiene en aspiraciones a dar retroceso constitucional.

Es hasta con el presidente Adolfo López Mateos, quien da otro giro en contra de intereses extranjeros y secuaces de la oligarquía y plutocracia más opinocracia que defendían la permanencia de capitales extranjeros en Energía Eléctrica.

Medio siglo en que el monopolio de las trasnacionales controló la generación, distribución y comercialización de la energía eléctrica en el centro del país, el presidente Adolfo López Mateos anunció –durante su Segundo informe de gobierno, el 1 de septiembre de 1960– que procedería en los siguientes días a concretar la nacionalización de la industria eléctrica del país al adquirir la mayoría de las acciones de las empresas Mexican Light and Power y American and Foreign Power, que desde el gobierno de Porfirio Díaz se habían visto favorecidas con concesiones amañadas que les permitían manejar tan importante sector a la conveniencia de sus propios intereses, al grado de convertirse, al paso de las décadas, en un peligroso lastre para el desarrollo de la economía nacional, que se concretó 27 días después, se apegó a la estrategia de que el suministro de energía eléctrica tenía que ser un servicio público con un claro compromiso social y nacional, por lo que no debía ser prestado por empresas extranjeras que a lo largo de varias décadas se negaron sistemáticamente a invertir en la expansión del sector para convertirlo en el detonante del desarrollo para el resto de las diversas ramas productivas, y de la población misma, que reclamaba no sólo un servicio más eficaz sino tarifas más justas.

Como para que no se nos olvide:

Discurso del presidente Adolfo López Mateos sobre la nacionalización de la Industria Eléctrica.

Septiembre 27, 1960

Compatriotas:

Al tomar posesión la nación mexicana de la Compañía de Luz, se consuma un largo esfuerzo desarrollado por el pueblo de México para tener en sus manos la energía eléctrica que en el país se produce por manos de mexicanos.

La nacionalización de la energía eléctrica es una meta alcanzada por el pueblo en el camino de la Revolución.

Siempre hemos sostenido que alcanzar una meta debe ser punto de partida para más importantes realizaciones, y ahora invitamos al pueblo de México a que, en posesión de su energía eléctrica, acreciente su industrialización para llevar a los hogares de todos, los beneficios de la energía eléctrica y los de la industrialización.

Hemos de velar todos por que la industria eléctrica en México se maneje con la mayor limpieza, para que todos sus beneficios sean para el pueblo y sólo para el pueblo. Y todos estaremos atentos y vigilantes para señalar con índice de fuego y para castigar en forma adecuada a quienes falten a la lealtad que deben a la patria y al pueblo.

No habrá en la industria eléctrica ni merinos ni ladrones, porque contamos no sólo con la energía del gobierno, que habremos de poner en juego, sino con la lealtad de los trabajadores electricistas, que habrán de ser soldados permanentes en la vigilancia de los intereses del pueblo.

Confiamos en su esfuerzo y en su patriotismo para responderle a México que su industria eléctrica se manejará bien, en beneficio del país; honestamente, en beneficio del pueblo; esforzadamente, en beneficio de México.

Yen esta ocasión en que se cumple una etapa más, podemos afirmar: México es cada día más soberano, cada día más libre, cada día más independiente, por el esfuerzo de ustedes, por el esfuerzo de todos los mexicanos.

¡Adelante... México es nuestro!

 

 

Es con el neolibealismo, donde la sentencia de Robert Lansing se cumple, porque al pie de la letra, los jóvenes identificados en una formación ajena al pueblo, al hacerse del poder político, promueven la pérdida de la soberanía al servicio de capitales extranjeros más de serviles capitales criollos a favor del extranjero, representado por Carlos Salinas de Gortari, quien bajo urgentes artimañas políticas y los corifeos orgánicos ponderaron las “reformas” a la Constitución “por el bien y desarrollo nacional”. Caro ha costado tal conducta apátrida, para cumplir la creación del Tratado de Libre Comercio.

La reforma al artículo 27, arrojó inmediatamente el empobrecimiento del campo y en materia energética petrolera y eléctrica, con el entonces secretario de Comercio, Jaime Serra Puche, quien hace cumplir la estrategia estadounidense de hacer pagar caro a Pemex, a la CFE y a la industria mexicana.

“A cambio de los cinco ´no´, querekos que abra al cien por ciento las compras de gobierno en especial las de Pemex y la CFE”, dijo Carla Hills a Jaime Serra en Watergate. Serra Puche propuso se reservara el 35% para proveedores nacionales. No, dijo Hills. Serra Puche ofreció quedarse con el 10%. no, dijo Hills.

Lansing siguió operando en la mente de más oligarcas y apátridas en el poder luego de salinas con Ernesto Zedillo, Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña.

Zedillo amplió el objetivo con la privatización de Ferronales y Puertos Marinos, Fox entabla la urgente necesidad de culminar la labor de Salinas y rematar a Pemex y la CFE.

La tarea estaba incompleta, hasta la imposición de Felipe Calderón, quien reinicia torcer la Constitución, al servicio de la privatización. Ya con Peña Nieto, entre ambos, se apegan a los intereses extranjeros, tal como lo he descrito en otras entregas, reitero que las reformas a los artículos 25, 27 y 28 constitucionales, más 21 artículos transitorios, no derivó originalmente de ambos, ni de los serviles legisladores aliados al poder, siendo bajo consigna de los senadores norteamericanos Richard Lugar y Lisa Murkowski, quienes les dieron dos documentos previos a que emitan las reformas (Strategic FP&A in the Oil and Gas Industry The Mexico Care, y el otro Energy 2020. A Vision for America´s Energy Future”, US Senate 113Th Congresess, February 14, 2013), donde empresas extranjeras resultan altamente beneficiadas en petróleo, electricidad, minas y agua.

No existió reflexión alguna a tal cinismo, se aprobaron las reformas bajo imposición de la mayoría de aquél entonces, contra la limitada oposición del PRD y PT.

Los Lansing, a través de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), quien ha interpuesto sendos amparos a favor del extranjero, bajo argumentos de que es una medida contra proceso incosntitucional del actual gobierno. El punto radica que si desde el salinismo a Peña, deformaron a la Constitución, ¿entonces quiénes son los culpables de violar la Constitución?

Entre poderosos empresarios y políticos mexicanos, se oponen a retroceder a perder privilegios. La historia no miente cuando muestra la radiografía completa de la criminalidad con la que actúan descaradamente.

En próxima entrega, daremos cuenta de más detalles, incluyendo lo electoral.

rodrigo.ivan@yahoo.com.mx

Analista político y de prospectiva social

FUENTES:

http://www.biblioteca.tv/artman2/publish/1960_95/Discurso_del_presidente_Adolfo_L_pez_Mateos_sobre__1435.shtml

Meyer, Cossío. L. México y el mundo. Historia de sus relaciones exteriores, vol. VI (México: Senado de la República, 1991), 14-15

Meyer, Cossío. L. México y el mundo. Historia de sus relaciones exteriores, vol. VI (México: Senado de la República, 1991), 14-15; Julius W. Pratt, A History of United States Foreign Policy (Nueva Jersey: Prentice-Hall, 1955), 466-485; Samuel Eliot Morison, Henry Steele Commager y William E. Leuchtenburg, Breve historia de los Estados Unidos (México: FCE, 1999), 621-622.

Inicia el proceso de Nacionalización de la industria eléctrica.

http://memoriapoliticademexico.org/Efemerides/9/27091960.html

La nacionalización de la industria eléctrica.

https://www.centrolombardo.edu.mx/la-nacionalizacion-de-la-industria-electrica/

Proceso, Acción que propiciará el resurgimiento del latifundio, 11 de noviembre de 1991, pp. 6-14

Proceso, Las urgencias de los tres gobernantes marcaron el ritmo al fin de la negociación, 17 de agosto de 1992, pp 6-17

Proceso, El petróleo como bien cultural , 25 de agosto de 2013, pp. 58-60

Meyer Cossío. L. México y los Estados Unidos en el conflicto petroleros: 1917-1942. méxico: El Colegio de México; 1981

Meyer Cossío L. Las raíces del nacionalismo petrolero en México. México: Océano; 2009.

Córdova. Arnaldo. La política de masas del cardenismo. México: Era; 1974

Gilly A. El cardenismo. Una utopía mexicana. México: Era; 2001

Pérez, Ana. L. Pemex RIP: vida y asesinato de la principal empresa mexicana: Grijalbo; 2018

 

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Rodrigo Rosales Escalona

Periodista y analista político en medios locales y nacional, filósofo, docente en nivel superior, activista social, comprometido con la justicia.