Se habla de la peor crisis económica de la que se tenga registro. Se vive una pandemia a nivel mundial que ha dejado miles de muertos y aún con vacunas ya existentes, no se ve que se detenga. La educación enfrenta el mayor reto de los últimos tiempos y en una generalidad no lo ha podido cumplir. Desempleo, deudas, sufrimiento. A esto se agrega una polarización social a causa de la política, y a unas próximas elecciones que agudizará este divisionismo. Así empezamos el año. El panorama es desalentador.

Invito al amable lector y lectora, a que hagamos un ejercicio de imaginación. Retrocedamos en la mente hacia la generación que nació en el año 1900. Cuando de ellos y ellas, apenas eran adolescentes, a sus 14 años, les tocó el inicio del primer conflicto bélico a nivel mundial. Imaginando a esa misma generación, cuando alcanzaron la mayoría de edad, vivieron la pandemia denominada gripe española, que dejó más de 50 millones de muertes en el mundo. Al cumplir 29 años, les tocó padecer la primer gran caída de la economía de la historia. Y a sus 40’s, vieron algunos de los horrores más grandes que se habían cometido con la segunda guerra mundial. Ufff. Visto desde este punto, su panorama no era desalentador, era catastrófico, y aún así, salieron adelante, sentaron las bases de lo que hoy somos y vivimos.

Dicen, y dicen bien, que todo depende del cristal con que se mire.

¿Cómo miras tú el contexto actual?

Un vaso con líquido a la mitad puede verse medio lleno o medio vacío. Y no pretendo hacer un texto motivacional, ni mucho menos alegar que el universo conspira a nuestro favor. Quiero hacer ver, de forma muy objetiva, que aún con una situación muy complicada, la actitud es fundamental para sobrellevar esta situación. Al pensar y actuar de forma optimista, quizá no se resuelva un problema, ni la situación mejore al instante, pero al menos nos dará más claridad mental para encontrar opciones. Retomo las palabras del gran Arturo Orantes (@arturoorantes): “La vida será diferente, cuando tú seas diferente. No vemos el mundo que es, vemos el mundo que somos.”

Y sí, hay muchos problemas, pero ellos son la oportunidad de encontrar grandes soluciones. Empecemos por mejorar nosotros mismos. El justo reclamo de coherencia a un alto funcionario público que se pasea en playas oaxaqueñas cuando había pedido quedarse en casa, puede perder sentido si quien lo hace tampoco ha seguido las normas básicas para el mejor manejo de esta pandemia.

Fui a entregar alimentos y material de protección a personal de primera línea del Hospital General de Cholula, ahí, uno de los doctores que está atendiendo a los pacientes covid, me dijo que estaba cansado, que estaba harto. Traté de animarlo, y le dije que pronto llegaría la vacuna y que todo empezaría a estar mejor. Su respuesta fue simple: “todo empezará a estar mejor cuando cada uno tome consciencia”.

Es justo alzar la voz, tanto para el reclamo como para el reconocimiento, es un derecho y en momentos es necesario, pero es indispensable que cada quien haga lo que le toca hacer de la mejor manera. No se puede pedir un cambio, si ese cambio no empieza por quien lo pide.

Hagamos que el panorama 2021 sea de esperanza, de oportunidades, de igualdad, de justicia, de salud, de prosperidad. Hagámoslo, haciéndolo en nosotros. Solo con el compromiso de cada quien, es como todo empezará a estar mejor.

Rescoldos.

Hay buenas noticias. Este Día de Reyes, hay grupos de personas llevando juguetes a niños de escasos recursos. Igual hay gente llevando comida a hospitales. En este momento, mientras tú lees estas líneas, se está planeando una entrega de ayuda a comunidades en extrema pobreza. Hay buenas noticias, y tú podrías ser parte de ellas, únete a una causa, de alguna manera, de algún modo, sé parte de este mejor panorama del 2021.

Rafael Reyes Ruiz

@RafaActivista

rafaactivista@gmail.com