Sufrimos un gobierno dictatorial en Puebla

  • Eleusis Córdova Morán

Tanto en los corrillos políticos como judiciales, es conocido el odio visceral que Miguel Barbosa tiene en contra de los dirigentes antorchistas y de su actividad política al frente de la organización. Ese odio visceral lo llevó a ofender sin razón o motivo alguno a la alcaldesa de Tepexi de Rodríguez, profesora Alondra Méndez Betancourt (de filiación antorchista) en una reunión de presidentes municipales, por haberse atrevido a plantear la necesidad de que el gobierno del estado atendiera las demandas más urgentes de la población. Hecho un energúmeno, de manera irracional, abusando del poder y de la cobardía de los demás ediles, negó a la presidenta todo derecho de petición, se burló del poder otorgado por los  ciudadanos de Tepexi a su alcaldesa, y le coartó groseramente el derecho de réplica. La presidenta no solicitaba obras para beneficio personal, pedía al gobernador la aplicación de recursos que, como producto de los impuestos que cubrimos los mexicanos, administra el gobierno del estado. Se arrogó el derecho de disponer, a su libre albedrío de recursos financieros que no son de él, abusando de la función de un simple administrador de los recursos del pueblo; por cierto, muy malo, como lo han venido a demostrar hechos posteriores.  

Dentro de esta conducta se enmarcan hechos tan graves, tales como las amenazas de muerte que de manera anónima han llegado al teléfono del Lic. Ovidio Celis Córdova, dirigente estatal de los transportistas adheridos a nuestra organización. Se intenta acabar con la vida de un joven y brillante profesionista de apenas 27 años de edad. Esta aseveración adquiere tintes de certeza al ir acompañadas de asaltos a mano armada, que han realizado grupos de malandros, a las bases de los taxis antorchistas en la capital poblana, en las que, de manera expresa, se interroga sobre el paradero y lugares de actividad del licenciado Celis Córdova. Suma y sigue. A este ambiente criminal se agregan los retenes policiacos  para detener, a la entrada de las ciudades, a los “taxis piratas antorchistas”; a los municipios se les obliga a adherirse a su política represiva e ilegal, ordenando de manera oficial que denuncien a mototaxis y taxis que operen en sus demarcaciones de manera “ilegal”, so pena de sufrir las consecuencias de su desobediencia; y, usando argucias legaloides, se evita el pleno funcionamiento  a  “Grúas Unión”. 

Todo este ambiente, brevemente dibujado, no deja lugar a dudas de que Miguel Barbosa lo que busca es liquidar al Movimiento Antorchista en Puebla. Si para ello tiene que violar el derecho a la libertad de tránsito, el derecho al trabajo para proveer al hogar de alimento fruto del esfuerzo honrado, ¡adelante! ¡Todo se justifica si tiene como fin acabar con la “insumisa Antorcha”! Por eso, sin importarle hacer el ridículo, ordenó que se girarán órdenes de aprehensión, por el supuesto “delito de robo agravado”, en contra de Rosario Sánchez Hernández, una humilde, pero decidida luchadora social que, según él, sustrajo unas despensas ¡frente a cuatro patrullas! Así vemos al “experto en seguridad” en acción y a todo color. 

Toda esta narrativa de hechos, la mayoría conocidos por la ciudadanía poblana, la enumero para demostrar que los rumores que corren en torno a la existencia de 16 órdenes de aprehensión en contra de dirigentes antorchistas, merece toda nuestra credibilidad. Todos los sucesos aquí narrados, demuestran que nos las habemos con un tipo enfermo de poder, con un individuo con ínfulas de dictadorzuelo que como Luis XIV, el “Rey Sol”, piensa que todo Puebla debe girar en torno a él, y… ¡ay de aquél que se oponga a sus designios!   

La conclusión es precisa. Las 16 órdenes de aprehensión existen y seguramente se girarán contra los dirigentes más destacados del Movimiento Antorchista en Puebla. Si denunciamos el peligro que se cierne sobre la libertad e integridad de los dirigentes, no es para recibir conmiseraciones de ninguna especie. Todos los que participamos en el Movimiento Antorchista Nacional sabemos que la lucha social conlleva graves peligros y altos riesgos. Por eso, la represión de Barbosa no nos asusta ni detendrá nuestra lucha. Se equivoca rotundamente si cree que descabezará al Movimiento Antorchista en Puebla con esa acción. Cientos de activistas se encuentran prestos a ocupar los puestos de dirección que la represión barbosista deje vacantes. Además, todo el antorchismo nacional está presto a demostrar que nuestro lema de Unión, Fraternidad y Lucha, se materializará mediante la presencia de miles de antorchistas en la capital poblana para denunciar al abusivo.   

Lo hacemos porque una vez más debe quedar claro a la ciudadanía, el carácter represivo, facineroso, dictatorial y represor del gobierno del estado y, por tanto, la necesidad urgente de no volver a votar llevados por el coraje, pues ese carácter tuvo nuestro voto en la elección pasada. Y veamos cómo nos está yendo: Según datos de CONEVAL cada hora: 13,700 personas pierden su empleo, 1,366 entran en pobreza, l7 empresas cerraran actividades, 255 personas se contagian de Covid-19, 28 mueren por covid-19, veinte personas mueren ejecutadas, 257 millones de pesos pierde Petróleos Mexicanos, 57 millones pierde la Comisión Federal de Electricidad. El gobierno tiene convertido al país en un verdadero desastre. ¿Queda claro que nos equivocamos al votar por coraje? Las elecciones de 2021 son el primer paso en la búsqueda de un gobierno mejor, pero que sólo lograremos conformar si razonamos concienzudamente nuestro voto. No lo olvides.  

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Eleusis Córdova Morán

Es un estudioso de la realidad nacional y es líder de Antorcha en la región de Izúcar de Matamoros.