#JusticiaParaTodas

  • Edurne Ochoa
“Nosotras no aparecemos muertas, a las mujeres nos matan”

La violencia es un fenómeno multifactorial, que comienza desde casa con roles de género asignados, repetidos y reforzados, hasta apologías de las violaciones sexuales en revistas de moda. 

Si entendemos que la violencia es estructural y sistémica podemos ver por qué las cifras que presenta México son tan escandalosas y preocupantes. De acuerdo a la OCDE nuestro país es el único que no ha querido hacer cambios a sus libros de texto, reforzando así las violencias simbólicas que  aparecen y reforzando los roles de las niñas y niñas los cuales más adelante serán pieza clave en sus relaciones y acciones. 

Nos han dicho que los seres humanos, nacemos, crecemos, nos reproducimos y morimos, sin embargo, en este proceso se les ha olvidado hablarnos de derechos humanos, libertades y una vida libre de violencias. 

En el apartado “se reproducen” deberíamos de hacer diversas anotaciones: 

No es obligatoria la reproducción, ser madre no es destino. 

No estamos solas e incompletas si no tenemos una pareja o si decidimos no casarnos. 

No es no.

Nadie tiene derecho a tocarte bajo ninguna circunstancia sin tu consentimiento.

El amor no duele

Y aquí me quiero detener, para reflexionar sobre el amor romántico y las terribles cifras de violencia familiar y feminicidios que presenta nuestro País. 

El 80% de los feminicidios son perpetrados por las parejas o exparejas de las mujeres, y la violencia familiar es la 2da. Más denunciada a nivel nacional.

Nos han ido condicionando desde pequeñas con los juguetes, caricaturas, educación y ejemplos en casa de lo que deberíamos ser las mujeres, donde nos han taladrado que el amor duele, que es nuestra cruz y que si no te cela no te quiere.

¿Así podremos salir de relaciones violentas las mujeres?

En días pasados tuvimos un terrible caso de intento de feminicidio en Puebla #JusticiaParaMichel donde el exnovio de Michel N. La violó, torturó e intentó asesinar, Michel N. Solo tiene 17 años y hoy enfrenta otra segunda batalla por su vida y en obtener justicia. 

Sin embargo, se intentó crear una campaña de desprestigió de la joven bajo argumentos moralinos ridículos, pero constantes en nuestra sociedad. 

¿ Ya viste cómo iba vestida? Bajo este argumento se esconden machismos y misgonias que distraen la atención de lo verdaderamente importante: INTENTO DE FEMINICIDIO.

¿Podemos creer que alguien merece este destino por cómo se viste,cómo actua o lo que comparte en sus redes sociales?

Me parece que no, el foco debería de estar centrado en un tipo violento que hoy tiene en un hospital a Michel N, peleando por su vida. 

Les invito a que nos duela más la vida de las mujeres y que nos pesen menos los juicios de valor morales, los cuales llevamos introyectados historicamente. #NiUnaMás  

Opinion para Interiores: