Después del complot contra el gobernador Luis Miguel Barbosa orquestado en la mente del periodista Arturo Rueda y que materializó en su periódico en una supuesta conversación de WhatsApp entre Fernando Manzanilla y Eukid Castañón, y que originó que el gobernador de Puebla se enganchara en el tema al declarar que “era muy grave ese hecho y que investigaría” y que coincidió en tiempos con la renuncia del Secretario de Gobernación Fernando Manzanilla. Después de estos acontecimientos todo mundo pronosticaba un rompimiento entre ambos personajes.

En sendas entrevistas una para el noticiero radiofónico de Ciro Gómez Leyva en donde Fernando Manzanilla mostró su altura política, ya que sus respuestas fueron de reconocimiento y respeto a su ex jefe el gobernador de Puebla y por el otro lado en una entrevista de las denominadas banqueteras, El gobernador Luis Miguel Barbosa por su parte contrario a lo muchos esperaban, en un tono conciliador al ser cuestionarlo por los periodistas de la fuente política señaló que si su ex colaborador decidiera contender en la próxima elección él estaría seguro que lo haría por MORENA y aliados. Ambos políticos en sus respuestas terminaron con la especulación de una fractura entre ellos, demostrando que ambos en el tema político no son unos novatos.

El gobernador Barbosa podrá tener defectos, pero el ser tonto no es uno de ellos. Él sabe que los resultados del gobierno municipal en la capital del estado no son buenos y con ello la 4 T. tiene graves problemas para repetir con una victoria en el 2021. Sin embargo, el que aparezca Fernando Manzanilla en la boleta por la capital será un factor que abonará a salvar esta elección, ya que en base a los estudios demoscópicos que se han publicado Manzanilla es el más competitivo que cualquier otro aspirante de MORENA y aliados. Y de no ser Manzanilla el candidato, el resultado posiblemente sería una derrota en el municipio de Puebla de los partidos que impulsaron a Barbosa para ganar la gubernatura. Con Manzanilla como candidato es otra historia. Sin duda Puebla capital es la joya de la corona de la próxima elección. No hay duda que entre Barbosa y Manzanilla la relación se descompuso en las últimas semanas del 2019, pero en este 2020 se percibe que los agravios ya están superados, se visualiza que ambos verán hacia adelante como lo dictan las mejores costumbres de la política, ya que a los dos les conviene. Fernando Manzanilla puede lograr la candidatura y ganar la presidencia municipal en el municipio de Puebla y Luis Miguel Barbosa conservar la capital del estado con un triunfo de la 4 T. que electoralmente es su responsabilidad.

Y si alguien se pregunta ¿y las diferencias entre ambos? La respuesta correcta es ¿cuáles diferencias? Si no hay.

De ese tamaño en el factor Fernando Manzanilla para la elección 2021.