LA ERA DEL CAOS Y EL RETO DE FORMAR…

  • Alberto Pacheco Márquez
¿cómo podría ser realmente la educación el motor de una nacion?

Por trillado que sea decir, que la educación es el motor más potente para el desarrollo, no es sino, retórica en su connotación más simple, lo que la educación ha sido siempre, dentro de las prioridades de los gobiernos en México.

Porque, ¿cómo podría ser de otra forma, si es de educación, de lo que carecen la gran mayoría de servidores públicos en nuestro país?

¿cómo podría ser realmente la educación el motor de una nación, cuando quien la dirige, desprecia profundamente el conocimiento y lo usa como un mero rasgo de vanidad y no como un valor que genere virtud en la vida pública?

Esta semana tuve la oportunidad de charlar ampliamente con un protagonista del sector educativo, quien a través de la universidad que dirige y que le ha permitido desarrollar una visión aguda, nos comparte su experiencia como formador.

Francisco Guzmán Hernández, es el Rector del Centro Integral de Estudios Superiores UNIC, abogado de formación y con un amplio bagaje tanto en el sector público y la vida empresarial.

Afable, abierto, hombre culto y de mundo, con un espíritu aventurero que ha forjado a lo largo de la toda la juventud acumulada que atesora.

-Apenas graduado de la facultad de derecho, comencé a dar clases, mi día comenzaba a las 5:30 am y finalizaba pasada la media noche, trabajaba en el gobierno, estudiaba la Maestría, e impartía clases en la universidad de un amigo.

Recuerda Francisco, al hacer un repaso de aquellos años que comenzaban a delinear el carácter del hombre.

Y es que, a través de los años, hemos pasado de las generaciones forjadas en la disciplina y las estructuras jerárquicas que inspiraban o imponían respeto, a aquellas que han disuelto por completo la figura de la autoridad, sustituyéndola por la de “influencer”.

-Los jóvenes carecen de una visión clara y es una tarea compleja, ayudarlos a encontrar su verdadero camino, porque hoy se preocupan más por lo que pasas en las pantallas de sus teléfonos y no en lo que realmente pasa en el mundo a su alrededor.

-Más que nunca, existe una dificultad para concentrarse, los estudiantes, están sometidos a tantos impulsos que maximizan efectos adictivos y estados de ansiedad brutales y nos imponen retos mayores, no solo es el aspecto cognitivo, sino emocional, psicológico, lo que tenemos que atender en proporciones adecuadas y muchas veces, sin contar con el respaldo desde los hogares de los estudiantes.

Francisco no se equivoca, desgraciadamente el uso de fotos y videos como lenguaje principal de las redes sociales, le da una importancia absurda y desproporcionada al aspecto estético y físico por sobre todas las demás dimensiones de las personas, y genera que  los estudiantes ya no buscan impactar a través de aspectos cualitativos, sino con la cantidad de LIKES y FOLLOWERS, que es lo que los mantiene cautivados y son la moneda en la comercian la aceptación social, viven la vida  para mostrarla y encima, llena de filtros irreales.

-Nuestra universidad, asume los retos, estudiando el entorno y entonces ofrecemos a los estudiantes, un sistema educativo que los acompañe, que haga que se sientan queridos en el proceso formativo y valorados, para que sus talentos puedan desplegarse adecuadamente.

-Sin embargo, valorar a los profesores es indispensable, el profesor es el elemento más importante, no es la tecnología, ni las aulas, es el profesor, el profesor necesita estar bien, para formar mejor, precisamente en la educación pública, es algo que poco se toma en cuenta, se habla de reformas educativas, se habla mucho del proceso de aprendizaje, pero poco toman en cuenta el estado de ánimo de los profesores.

Otro tema que no podía faltar, es la situación actual de nuestro país, de nuestro Estado, de la Ciudad, porque todo está interrelacionado entre sí, no puede existir armonía en el desarrollo sin aspectos fundamentales como la seguridad.

-Lejos de avanzar, retrocedemos, pasamos de vivir con precauciones, a vivir en el terror, y eso también impacta en el proceso formativo de los estudiantes, porque sin un entorno social adecuado, es muy difícil ponerlos en el carril adecuado de atención.

-Nuestros servidores públicos, llegan a los puestos no en base a méritos ni formación, sino a compadrazgos y encima de todo, justifican sus incapacidades en el pasado, se asumen como víctimas en detrimentos de los ciudadanos.

No obstante, Francisco es positivo, confía en que toda crisis siempre trae oportunidades, que, si bien no son fáciles de identificar, es cuando más agudos debemos tener los sentidos y sobre todas las cosas, anclados a nuestros valores.

-Tu cambias un sistema educativo, lo mejoras y eso tiene un impacto brutal, es vivir de acuerdo a principios que busquen darle a cada ser humano su dignidad y su grandeza, enseñarles a los estudiantes a vivir con un propósito.

Poco menos de 10 años, lo que UNIC lleva formando profesionales, podría decirse que aún es poco tiempo, pero no son pocos los éxitos reflejados a través de los profesionales que se están integrando con éxito a la vida laboral.

Mucho por mejorar sin duda, pero es que, precisamente la educación es eso, mejorar día con día, porque el conocimiento prescribe, pero los valores nunca, y la armonía entre valores y conocimientos, es lo que Francisco forja en sus estudiantes.

-El líder transforma con el ejemplo, inspira, conmueve…

Nos vemos cuando nos leamos.

Alberto Pacheco

Albertopm2711@gmail.com

Opinion para Interiores: 

Anteriores

Alberto Pacheco Márquez

Especialista en Desarrollo Regional y Gestión de Inversión Extranjera y Conferencista. Se desempeñó en el sector público y privado en México como en el extranjero. Dedicado a la vinculación entre México y Polonia