Nuevo gobiernos, nuevas expectativas

  • Xavier Gutiérrez
Están sobre la mesa una serie de asuntos que forman una especie de herencia maldita.

Existen elementos para pensar que el gobernador electo Luis Miguel Barbosa, va a seguir un estilo de gobernar muy cercano al del presidente Andrés Manuel López Obrador.

Aparte de guardar con él la comunicación derivada de la identidad partidaria, seguramente veremos acciones que tendrán un cierto paralelismo, además de la inspiración.

Se ha hecho saber que entre sus proyectos figura llevar a cabo en Puebla un cambio de régimen. Y creo que habremos de ver acciones de gobierno que tocarán asuntos e intereses de fondo.

El gobierno próximo tiene una magnífica oportunidad de arrancar con el pie derecho.

Están sobre la mesa una serie de asuntos que forman una especie de herencia maldita.

Todo mundo tiene presente que en los ocho años de los gobiernos morenovallistas el derroche dejó muchas huellas. Y en lo económico, las deudas a las que está uncido el presupuesto del gobierno estatal le disminuyen notablemente margen de maniobra.

De manera que, primero por legítima supervivencia, la nueva administración procede ya con lupa a revisar la letra chiquita y la mayúscula de todo lo que será factible revertir.

No cuesta trabajo imaginar que atrás de todas las obras de relumbrón, con presupuestos inflados y ampliados, hay una montaña de negocios. Habrá sin duda muchos convenios, negocios, “amarres” y compromisos envueltos en paquetes de “legalidad”, que son susceptibles de desarticular.

Empezando por ventilar públicamente quiénes están, personas o entidades, reales o artificiales, atrás de toda la podredumbre que se hizo con recursos públicos, tanto estatales como federales.

Y esto incluye a las instituciones que se prestaron para autorizar, legalizar,  certificar o “auditar” todo el enorme gasto que se hizo con la voluntad dictatorial de un solo hombre.

 Atrás está, es evidente, toda una cadena de cómplices de toda laya.

Pero además, el nuevo gobierno tiene a su favor que quien o quienes podrían intentar alguna defensa o resistencia a las investigaciones o a la acción abierta de la ley, o ya no están o están bajo sospecha.

Esto último inclusive, ha brotado  entre los comentarios que circulan en voz baja, en el sentido de que ya hay morenovallistas de segundo y tercer nivel, que con el ánimo de tratar de salvar la acción de la ley, se han acercado para aportar alguna información o documentos para enderezar la acción de la justicia.

Es factible que esto pudiera ocurrir.

En este filón y en otros más, el gobierno que arrancará en unos días más tendrá la sartén por el mango para aplicar la ley de modo vertical.

Y no sería extraño que ello implicará acusaciones concretas, con nombres y apellidos, cárcel inclusive, para algunos vivales del pasado reciente.

Con estos elementos como herramienta política, no podía ser más afortunado el inicio de la administración nueva. 

Tendrá, asimismo, la oportunidad de innovar en múltiples frentes.
La incorporación de elementos nuevos en las distintas responsabilidades de gobierno, le dará frescura y libertad de acción a los funcionarios.

No tendrán ni la sombra ni los compromisos del pasado .

Y algo más como telón de fondo: las acciones que ha emprendido la administración federal, muchas de ellas al menos, pudieran servir como punto de partida,respaldo, inspiración o modelo para todo lo que incluya el gobernador Miguel Barbosa en el gobierno que está por comenzar.

Con todo esto, nos parece que hay bases para pensar que el nuevo gobierno parte de un trampolín cómodo, optimista y con expectativas muy altas.

xgt49@yahoo.com.mx

Opinion para Interiores: 

Anteriores

Xavier Gutiérrez

Reportero y director de medios impresos, conductor en radio y televisión. Articulista, columnista, comentarista y caricaturista. Desempeñó cargos públicos en áreas de comunicación. Autor del libro “Ideas Para la Vida”. Conduce el programa “Te lo Digo Juan…Para que lo Escuches Pedro”.