Las isla y sus habitantes

  • Francisco Fraile
Historia de un gobierno.

En una isla de 34,251 km², cuyo nombre no logro recordar, con una gran diversidad de flora y fauna, y brillantes e inteligentes habitantes, todo parecía tranquilo y tomando cause como un día cualquiera, cuando un día de Diciembre, sus gobernantes tuvieron un accidente donde esposa y esposa en turno  pierden la vida, aún no se sabe las causas de esas pérdidas.  Y es Ahí donde empieza una historia que me permitiré contar .

Aún las cenizas de los mandatarios estaban a la vista de todos, las personas en duelo, incluyendo los padres, la hermana, el exmandatario anterior de la Isla en una explanada llamada V, algunos dicen el nombre se lo pusieron por haber ganado la gobernatura, otros por un día  5 de Mayo en el que hubo un acontecimiento militar, ¡vaya usted a saber!

Lo cierto  es que mientras esta ceremonia iba a comenzar, en el interior de la Casa del Ejecutivo, cinco personajes muy cercanos a ellos,  discutían acaloradamente quién era el heredero del poder de los recientes mandatarios muertos. Cada uno presentaba con orgullo sus méritos de acción en el campo de batalla democrático, porque, eso sí, la Isla era profundamente democrática, y aseveraban que sin su presencia el gobierno y el partido político postulante de los accidentados, sería un fracaso. Luego entonces, se perdió el gobierno interino y se desaparecieron de la escena política. Hubo quien hasta anunció su retiro definitivo de la política, estos hoy soy considerados los “viudos” por los isleños. Los otros aún  les cabe la esperanza, para ser llamados por el Instituto Político después del diluvio, asuntos frecuentes en la Isla, a estos se les conoce como los “Noés”.

Otros menos definidos ante los acontecimientos , cuyo amor por los idos, era una cuestión de monedas, prefirieron convertirse en críticos acérrimos del Instituto Político y golpear vía medios de comunicación alternativos. Eso sí, la Isla es avanzada en esos instrumentos: golpear por golpear o bien tomar una actitud de brazos caídos, similar posición de quienes decidieron irse, pero estos ya afilan las navajas para convertirse en jueces implacables y usar la guillotina para calmar su conciencia, y poder decir “se los dije, solo yo sé cómo se hace esto”.  A estos los isleños los conocen como los “agazapados”.

Otros, cuando la campaña empezaba a ser buena y quien quita se podría ganar, decidieron llamar a la prensa, amenazar con abandonar al partido, promover su imagen en mítines del candidato a gobernante de la isla, como un hombre o mujer adorados, siempre el ego por delante empujando y apareciendo  como generosos con el candidato.

Sin embargo los isleños , honestos consigo mismos, isleños sin apellido, congruentes con sus principios doctrinales, decidieron hacer política de la buena, esa que no pasa por la compra venta, esa acostumbrada a tener una sola razón para actuar su Isla, su patria y que  con saliva, sudor y suela salieron a luchar por su ideal.

Toda similitud con la realidad es mera pero merita coincidencia .

Bien y de Buenas

@paco_fraile

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Francisco Fraile
Ciudadano, maestro y servidor público. Ha sido Senador,  Diputado Federal y Delegado del Seguro Social en Puebla. Maestro, ponente y autor de "Y los obreros ¿Qué?" entre otros.