Sin piso para la paz

  • Marcela Cabezas
“(…) en tiempos de guerra como en tiempos de paz hay que estar preparado para la guerra”

Además del luto que envuelve a múltiples familias colombianas el atentado a la Escuela General Santander en Bogotá generó el efecto predecible: se rompe la relación del gobierno de Iván Duque con la guerrilla del ELN y de lejos se avizora la posibilidad de una salida negociada al conflicto armado de vieja data en el país.

Como expresó Nicola Maquiavelo “(…) en tiempos de guerra como en tiempos de paz hay que estar preparado para la guerra”(1) así la premonición de la paz en un Estado harto enseñado al conflicto no se presenta como hecho fortuito sino como un proceso de largo aliento del que los contendientes deben renunciar a ciertos apetitos en busca del anhelado bien común.

Tal máxima colectiva queda en entredicho en la medida en que una parte se empecina en continuar con su modus operandi al tiempo que aboga al discurso de la reconciliación entre los colombianos, y el gobierno por su parte se empecina en la seguridad y el orden – Estado de derecho- en un Estado asediado históricamente por grupos armados ilegales de diversa índole.

El hecho es claro, un atentado con carro bomba el pasado jueves a la escuela de oficiales de la policía colombiana que dejaría como saldo a 21 muertos y más de sesenta heridos es repudiado por la sociedad colombiana y la comunidad internacional, desafiando la intención de un posible escenario de desmovilización del Eln y una posterior reconciliación en el país muy animada desde el gobierno antecesor. https://elpais.com/internacional/2019/01/18/colombia/1547818032_445894.html

El saldo principal de tal hecho es la terminación de los diálogos de paz con la guerrilla del ELN que desde hace dos años atrás ha tenido bastantes tropiezos por parte y parte.

A tono con las declaraciones del mandatario colombiano se solicita que Cuba- quien fungió como Estado garante de los diálogos con la guerrilla de las Farc- haga entrega de los negociadores de esta guerrilla que se encuentran en su territorio al emitirse circular roja a los cabecillas. https://www.eltiempo.com/politica/gobierno/ivan-duque-pidio-a-cuba-capturar-y-entregar-a-cabecillas-del-eln-316390.

Sin duda el resquebrajamiento de la mesa de negociación es la noticia del momento en el país, más allá de esto queda también una sociedad harto asqueada de la guerra de guerrillas que causa tanto daño a la población civil y al tejido social, misma perpetrada por paramilitares, narcotraficantes, disidencias, águilas negras, etc. etc. La lista continua (…).

Por tal, una salida negociada al conflicto armado colombiano no solo está lejos de la realidad política, sino también es inminente el reforzamiento de las acciones militares que, no menos veces han resultado bastante dudosas en cuanto a los vínculos entre lo ilegal y lo legal.

De tal disputa los intereses de figuras políticas como Uribe, Petro y demás también saldrán a relucir, sobre todo porque las elecciones a diversos cargos públicos se avecinan y en medio del luto de los familiares de los muertos y heridos hay tiempo para hacerse con el fortín político.

En ultimas, la mirada aprobatoria del país y de la comunidad internacional frente a la salida negociada al conflicto con más de un intento en la historia política colombiana se devela mas como un mito que una realidad. Los actores contendientes mientras tanto continuaran disputando sus intereses desdibujando la agenda de aquel pacto social común en el que recae el Estado-moderno: tesis y antítesis.  

Notas

Maquiavelo, Nicola. (1531) El Príncipe

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Marcela Cabezas

Magíster en Ciencias Políticas y politóloga colombiana. Catedrática y columnista en prensa independiente.