¡Corruptos!

  • Nyx Diahann Sánchez Fierro
La corrupción se vive todos los días al omitir acciones que permitirían vivir en un mejor entorno.

Para indagar en este concepto es importante destacar que no es un término exclusivo de la organización política de determinado lugar, ni de funcionarios públicos, tampoco es un adjetivo que determine la principal causa de las carencias de nuestro país, en adelante se identificará a la corrupción como cualquier acción humana que altere lo que las normas establecen, o bien, que distorsione los principios éticos a los que todas las personas tenemos derecho.

La corrupción puede darse en cualquier contexto, no aplica solamente para las personas con poder, con cargos públicos o dependencias de gobierno, es una manera cómoda de responsabilizar a alguien más de las situaciones y decisiones poco favorables que se han tomado para la organización política de  nuestro territorio, pero también es la mejor opción para evadir lo que nos compete hacer como miembro de una sociedad, es el pretexto ideal para vivir inconformes y una manera fácil para evitar perder, ya sea dinero, tiempo o poder.

Ser corrupto tiene una estrecha relación con el tipo de educación que se tiene, con la falta de aplicación de valores, de decisión, de sentido de pertenencia, lo que se quiere y se concibe como parte de nosotros no se evita, al contrario se cuida y se provee para que tenga un funcionamiento óptimo. En México no es la corrupción lo que nos limita a ser mejores personas, es la falta de educación, de interés por cumplir con lo correcto, lo bueno o lo aceptable y aplica desde un soborno, mismo que se proyecta como un acto intencionado con la finalidad de “ganar” (a favor del interesado), sin importar las normas que están establecidas, ni el proceso para asumir la sanción a la cual se es acreedor por haber actuado en contra de nuestra integridad como persona.

La corrupción se vive todos los días al omitir acciones que permitirían vivir en un mejor entorno, es provocada porque más de una persona acepta involucrarse en decisiones incorrectas, si se fuera más consciente de lo que esto provoca seguramente se evitaría aceptar estas acciones; esta situación se vive todos los días en los entonos inmediatos, casa, trabajo, escuela, sociedad, es notable que cuando no son actos injustos para nosotros nada malo pasa, a menos que alguien más se vea beneficiado y no se obtenga nada que esto.

La educación que favorece una mayor calidad como persona, está estrechamente relacionada con el sentido común (para actuar de una manera justa y precisa), más que con conocimientos académicos, es ser transparente y enfrentar de manera correcta los resultados (buenos o malos) de las decisiones que se toman.

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Nyx Diahann Sánchez Fierro

Licenciada en Psicología Social UAT. De 2011 a la actualidad se ocupa en la labor docente en distintos niveles educativos, debido a esta trayectoria estudio la maestría en Pedagogía en la UPAEP