Recientemente en un encuentro sobre temas de seguridad del país, el presidente de la República expresó una idea: las instituciones de seguridad sufren del bullying de la sociedad civil. Veamos con más precisión el tema:

Primero.- Las áreas de la seguridad de los gobiernos federal, estatal y municipal se enfrentan a delincuentes de diverso orden. Esta actividad la hacen diariamente contra grupos del crimen organizado y otro tipo de delincuentes.

Segundo.- Las instituciones de procuración de justicia y de seguridad pública tienen que enfrentar a los elementos dentro de sus propias filas que responden a los intereses de los grupos criminales.

Tercero.- Las corporaciones policiales, especialmente ellas y no las áreas administrativas, son objeto de las presiones de voceros de grupos de la sociedad que cuestionan su actuación.

El fuego balístico que enfrentan es propio de la naturaleza de su actividad, pero el tercero no y seguramente hay diversas circunstancias por las que se dan los casos dos y tres.

Cuando existen elementos policiales que responden a intereses ajenos a las corporaciones, estos deben ser denunciados, investigados y tratados conforme a ley, pero en México sucede un fenómeno peculiar ya que en estos casos se cuestiona a la institución y no a las personas.

El presidente fue criticado por defender a las instituciones policiales siendo que no dirige a la gran mayoría de ellas, al parecer no se comprende que el Ejecutivo defienda a las instituciones del país, aunque sean de distintos niveles y dependan de poderes ejecutivos extraídos de partidos políticos diferente al suyo.

Cuando se combinan estos tres tipos de “fuego” las intuiciones policiales se ven mermadas; puede entenderse que sean atacadas por la delincuencia, pero resulta extraño que voceros de la sociedad civil con sus críticas aparezcan en el panorama público de lado de los criminales.

El escritor británico Anthony Burgess escribió en La Naranja Mecánica: “El mero hecho de que la policía no te haya atrapado últimamente no significa, como tú lo sabes muy bien, que no hayas estado cometiendo algunas fechorías”.

@EGAnguiano