Interesante estudio realizado por “Mexicanos contra la corrupción”, pone en evidencia algo que es un secreto a voces al seno del tercer Poder de la Federación, se trata de una amplia red de parentelas que forman cacicazgos que impiden y contienen el ingreso de nuevos funcionarios públicos a una institución cuya credibilidad va en detrimento.

El estudio de “Mexicanos contra la corrupción” habla de al menos 112 jueces y magistrados distribuidos en los circuitos judiciales que integran los tribunales de la federación por todo el país. Se dice que esposas, hijos, nietos, sobrinos, hermanos y hasta amantes de jueces y magistrados federales, forman precisamente la pirámide de nepotismo más grande del país.

Es incuestionable que esta red de nepotismo esté tutelada por ministros de la Suprema Corte y evidentemente por el propio Consejo de la Judicatura, pues bastaría que desde la contraloría interna de la Corte se analizara la nómina de servidores públicos para evidenciar sin mayor complejidad que el estudio elaborado entre otros por Valeria Durán, Dulce González y Raúl Olmos, se encuentra absolutamente cercano a la realidad.

La pérdida de credibilidad en una institución donde la confianza se sostenía de un hilo es ya incontenible. El empobrecimiento de los fallos que hoy emiten los tribunales de la federación son producto de la escasez de capacidades que solo es buscada dentro de la parentela de jueces y magistrados, cerrando propiamente las puertas al intelecto que no nació dentro de esta casta privilegiada.

Existe marcada molestia al interior del Poder Judicial de la Federación, sin embargo la misma no se refleja públicamente pues los funcionarios con aspiraciones prefieren callar y soportar que muchos hijos de magistrados o jueces les pasen por encima a cambio de seguir percibiendo una dieta

saludable y tener un trabajo “estable”, en el que muchas veces tienen que soportar acoso sexual, malos tratos y arbitrariedades laborales.

Mexicanos contra la corrupción, no dejará en el olvido el estudio que hizo llegar a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, pues en un segundo paso podrían evidenciarse públicamente nombres de jueces y magistrados beneficiados al amparo de la impunidad. Los resultados podrían sorprender a propios y extraños y desde luego, la tarea será la aplicación de las leyes reglamentarias al sistema nacional anticorrupción, ello mientras no se tipifique debidamente el nepotismo como delito, sin embargo las redes sociales pueden ayudar haciendo eco en torno a la denuncia que mexicanos con dignidad y amor al país presentaron a la Suprema Corte de Justicia de la Nación.

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