Las métricas de vanidad en las redes sociales

  • Marisol Calva
Relevancia de las redes. No es la cantidad sino la calidad lo que importa.

Desde que las redes sociales han adquirido protagonismo en la arena política y electoral, han proliferado numerosas estrategias para captar simpatías pero sobre todo votos.

Los políticos han entendido que su presencia en redes sociales es elemental para ser parte de la conversación de los 70 millones de internautas mexicanos.

Sin embargo estar presente en redes sociales, no significa que estén hablando de ti.

En los últimos años hemos sido testigos de cómo se ha generado esa falsa creencia de que a mayor número de seguidores, mayor influencia. Esta idea se le ha vendido a numerosos personajes que creen que inflando sus cuentas con seguidores falsos o bots, conseguirán ser influyentes, lo cual es un autoengaño.

Este tipo de métricas basadas en número de seguidores, son una métrica de vanidad que no tienen el valor que se le ha pretendido dar. Sí importa posicionar al político en redes sociales, pero lo que aún es más importante, es generar dialogo para construir comunidad.

Hoy en día, las redes sociales son un termómetro del humor social, es evidente que existe un mal humor hacia la clase política, que ha  encontrado en las redes sociales su válvula de escape para liberar un poco de la frustración social que predomina, sobre todo en páginas y perfiles de política y de políticos. Sin embargo el verdadero reto de quienes usan las redes sociales como un medio para acercarse al ciudadano, es llevarlo del activismo de sillón, a una activa participación ciudadana.

Con los problemas que afectan al estado de Puebla, como feminicidios, robo de huachicol y la ola de inseguridad, lo que más le importa al ciudadano, es la propuesta que el político o gobernante tiene para ayudarlo a resolver una problemática que le afecta todos los días. Banalizar la importancia de las redes sociales, circunscribiéndola a una mera medición de seguidores y likes, es estar encerrado en una burbuja ególatra que no permite ver más allá de lo que muestra la caja de resonancia en la que se han convertido las cuentas de redes sociales.

Muchos políticos y gobernantes alrededor del mundo han logrado avanzar de la comunicación unidireccional y de monólogo en redes sociales, a un verdadero diálogo entre ciudadano-gobierno. Aprovechar el potencial que representan Facebook, Twitter, Youtube, Instagram y todas las redes que están ganando influencia en México, es una muy buena inversión, porque representan el buzón de quejas y sugerencias de la sociedad moderna.

En el caso mexicano, existen dos referentes que demuestran que no es el número de seguidores lo que te hace influyente, sino la forma en la que interactúas con tu audiencia. Jaime Rodríguez Calderón “El Bronco” arrancó con una clara desventaja en términos de posicionamiento, no gozaba del nivel de conocimiento en redes sociales que los otros candidatos por la gubernatura de Nuevo León, pero desde el momento de su anuncio como candidato independiente, inició una intensa campaña en redes, en donde el mensaje y la interacción fueron la clave para hacerlo el rey de la conversación digital. Para lograr ser candidato necesitaba 103 mil firmas, el 3% del padrón electoral de Nuevo León, empezó a recabar firmas el 29 de diciembre de 2014 y para la segunda semana de enero había conseguido ya 150 mil firmas, en febrero de 2015, entregó casi 395 mil firmas para ser registrado como candidato a la gubernatura, triplicó lo que la ley le pedía; y lo más sorprendente de este caso, es que el fuerte del activismo fue impulsado a través de redes sociales. Fue el mensaje y escuchar el hartazgo social lo que lo llevó a tener una estrategia exitosa, El Bronco  logró sumar miles de simpatizantes que al final lo acompañaron a las urnas porque entendió lo que el electorado le estaba gritando.

El segundo referente es Juan Zepeda, candidato del PRD a la gubernatura del Estado de México, su cantidad de seguidores era mínima comparada con las cuentas de Josefina Vázquez Mota y Alfredo del Mazo, sin embargo, su estrategia, storytelling, y manejo de redes, lo llevaron a dominar la conversación durante la última recta de la campaña, siendo el candidato sorpresa que le robo miles de votos a la panista con millones de seguidores.

Moraleja: No es la cantidad de tus seguidores, sino la calidad de tu estrategia en redes sociales. 

@Marisol_Calva 

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Marisol Calva

Politóloga, Maestra en Gobierno y Administración Pública, Secretaria de la Comisión Nacional de Redes Sociales de Movimiento Ciudadano. Ex candidata a Diputada Local