Morena, la guerra de lodo

  • Carlos Figueroa Ibarra
Guerra sucia del modelo neolibaral. El video de Cadena es otro más de sus ataques

Mi primera columna en el diario  e-consulta  llevó por título “México, comenzó la guerra sucia”.  Publicada el 1 de marzo del presente año  tenía por objeto destacar que el avance de Andrés Manuel López Obrador y Morena en las preferencias electorales,  había encendido los focos rojos del establishment neoliberal. Dos meses después, la guerra sucia se ha incrementado por el escándalo del video en el cual aparece recibiendo medio millón de pesos la candidata a presidenta municipal del municipio de Las Choapas en Veracruz y diputada local Eva Cadena.  Una voz dice lo más claramente posible que ese dinero “es para Andrés Manuel López Obrador. ¿Fue Eva Cadena víctima de una trampa similar a la que Carlos Ahumada le puso a René Bejarano? ¿O es parte de un simulacro al que ella se prestó para enlodar la imagen de Andrés Manuel? El tiempo desenmarañará la madeja de esta nueva conjura como la que se observó en 2004  con los videoescándalos que buscaban destruir electoralmente a López Obrador. Por el momento, la ex candidata ha dicho que  ir a esa reunión y aceptar el dinero, fue un error personal, que el líder de Morena es ajeno al asunto  y que además ella no es cercana a éste.

Los verdaderos mafiosos, el dirigente del PAN que lleva un ritmo de vida inexplicable para sus ingresos declarados, el presidente del PRI que tiene ingresos ilegítimos, el actual gobernador de Veracruz cuya reputación de gángster  es ampliamente difundida, son algunos de los actores que hoy acusan a Andrés Manuel de delincuente con ingresos oscuros que acaso provengan del crimen organizado. La manipulación mediática es obvia, un acto indebido de una partidaria del dirigente de Morena sirvió para que la derecha neoliberal se lo endilgue a éste de manera totalmente gratuita. El pleno de la Cámara de Diputados por iniciativa del PRIAN ya pidió que la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO), investigue la posibilidad de financiamiento ilegal o criminal a Morena. Mientras eso sucede  el establishment neoliberal a través del PRIAN hace los arreglos posibles para exonerar Emilio Lozoya con respecto al imputado soborno que habría recibido por 5 millones de dólares por parte de la empresa española OHL. Y es sabido que en la investigación por  sobornos a la empresa brasileña Oberbrecht  estarían implicados el ex presidente Felipe Calderón y el mismo presidente Peña Nieto.

La mayoría de los medios de comunicación ya se unieron al linchamiento mediático similar al que sufrió el entonces Jefe de Gobierno, Cuauhtémoc Cárdenas en 1999, cuando el conductor de televisión Paco Stanley fue asesinado.  Similar a la guerra de lodo que el mismo López Obrador recibió con motivo de los llamados videoescándalos de 2004 y la campaña de desprestigio que afrontó cuando en 2005, se creaban  condiciones para desaforarlo a efecto de impedirle ser candidato. Un sistema envilecidamente corrupto como lo evidencia la presencia de personajes como el ex gobernador Javier Duarte,  ahora busca vincular a éste arquetipo de la corrupción con Morena y  con su dirigente. Oculta que Duarte fue uno de los principales financistas con dinero sucio de la campaña de Peña Nieto. Los 25 millones de pesos encontrados en una avioneta a Miguel Morales Robles en enero de 2012, muy probablemente eran para la campaña de Peña Nieto. Calderón no quiso investigar el asunto porque hubiera hundido al candidato del PRIAN mejor  posicionado para enfrentarse a López Obrador.

He aquí uno de los tantos hechos que muestran que el monstruo bicéfalo neoliberal bañado en lodo y heces fecales, desesperadamente se las lanza  a Morena.

Opinion para Interiores: 

Anteriores

Carlos Figueroa Ibarra

Sociólogo, profesor investigador de la BUAP, especializado en sociología de la violencia y política. Doctor Honoris Causa por la Universidad de San Carlos de Guatemala. Fue integrante del Comité Ejecutivo Nacional de Morena (2015-2022).