¡No se fugó o lo fugaron!

  • Pablo Rangel Sarrelangue

Se trata del sentir de una sociedad cansada de mentiras, de montajes, de atropellos, de agravios económicos, de cortinas de humo, de falsas expectativas, de burlas, de chantajes, de vivir cuidándose de dos grandes mafias que asfixian todas las libertades del ser humano, es decir la cupular mafia política y empresarial que atropella y abate con mayor disimulo que aquella que integran los grupos de la delincuencia “ordinaria”.

A quién pretende hacer creer el Estado mexicano y sus comparsas en los medios que Joaquín Guzmán Loera, el “chapo Guzmán”, se fugó bajo la asesoría de grandes ingenieros civiles, pues simplemente a ese México que nuestros políticos y las grandes cadenas de televisión siguen comparando con aquel indito dormido bajo el nopal.

Quienes por razones del ejercicio de la profesión hemos ingresado a los Centros Federales de Readaptación Social, sabemos perfectamente que una fuga de ellos sin la anuencia o la “intencionada negligencia” de su personal de seguridad es verdaderamente imposible, esto es, dichos centros penitenciarios federales se erigen en superficies territoriales no inferiores a 56 hectáreas, para ingresar a ellos como visita o como abogados litigantes se requiere superar al menos once filtros de seguridad, las visitas son agendadas por vía telefónica con al menos setenta y dos horas de anticipación.

En los filtros de referencia las medidas de ingreso son tan estrictas que sólo se ingresa con zapatos absolutamente de plástico y sin ningún objeto metálico por mínimo que éste sea. Está absolutamente prohibido el ingreso de bolígrafos, para recabar la firma de un interno los abogados postulantes debemos dejar nuestros ocursos en un área específica y recoger éstos tres días después. Las audiencias de juicio se desahogan propiamente dentro de los CEFERESOS, es decir, en salas hasta donde llega el personal de los tribunales federales.

Es indispensable pasar con vestimenta de un color específico. En las áreas de visita no existe un contacto directo con el reo y el diálogo con éstos es absolutamente video grabado y audible por el propio personal de seguridad y custodia, los reos son albergados en módulos de alta seguridad de acuerdo a sus antecedentes y conducta. Los mexicanos pagamos por vía de nuestros gobernantes 560 mil pesos diarios por concepto de alimentación diaria para los reos de cada CEFERESO.

En la Republica mexicana existen aproximadamente 50 mil reos federales, lo cual representa casi un 22 % de la población penitenciaria en todo el país. CEFERESOS, como el de Puente Grande Jalisco, con una capacidad para 836 internos tiene actualmente cerca de dos mil reos, es decir una sobrepoblación de más del cien por ciento. Cada reo tiene un pase de lista en intervalos de una hora.

El CEFERESO, de donde se dice “se fugó”, el llamado capo de capos se ubica en Santa Juana, Almoloya de Juárez estado de México, bajo los muros que contienen estos centros penitenciarios existen placas de acero de más de dos metro de profundidad en sus cimientos, los planos de estos centros penitenciarios son propiamente secreto de Estado. El diálogo entre internos es absolutamente prohibido según los propios protocolos de seguridad de estos centros de reclusión federal y en este último existen huéspedes distinguidos como Miguel Ángel Treviño Morales “Z40”, Servando Gómez Martínez “la Tuta”, Oscar Omar Treviño Morales “Z42”, Edgar Valdez Villareal “la Barbie”, Daniel Arizmendi López “el Mocha orejas”, José Luis Abarca Velázquez, relacionado al crimen de los 43 estudiantes de Ayotzinapa Guerrero, Eduardo y Francisco ambos de apellidos Arellano Félix. También en este lugar de reclusión fue asesinado Arturo Guzmán Loera “el Pollo Guzmán”, hermano del ahora prófugo “Chapo Guzmán”.

Inteligentes lectores la fuga de Guzmán Loera, se da como hace algunos meses aconteció cuando acribillaran a 43 estudiantes en Ayotzinapa, es decir, precisamente cuando Enrique Peña Nieto y familia realizaban visitas oficiales por tierras europeas. La cortina de humo que este suceso pretende abarcar es de considerarse, esto es, la aprobación para la privatización del Seguro Social, la mal estructurada reforma educativa, la privatización del agua potable en prácticamente todo el país y la caída libre de nuestra moneda. El llamado “Chapo Guzmán”, es ahora el principal distractor de un Estado para la realización de una serie de eventos próximos a los que es importante centrar atención, pero es incuestionable que dicha supuesta fuga era indispensable a fin de no afrontar la extradición de un personaje que mucho sabe de las mafias políticas mexicanas.

jurídico_rangel@hotmail.com

 

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Pablo Rangel Sarrelangue

Abogado por la Benemerita Universidad Autonoma de Puebla, Maestro en Derecho Penal por la Universidad Autonoma de Tlaxcala, Ex-Secretario de Juzgado de  Distrito de Tribunal Colegiado y Tribunal Unitario en el Poder Judicial de la Federacion