Los principales indicadores para evaluar el desempeño de los gobiernos municipales refieren a que tanto son eficientes o eficaces en su capacidad de  atención de las demandas ciudadanas, en la promoción y/o aceptación de la participación organizada  de la ciudadanía de manera autónoma , de modo que en la medida que los ciudadanos hagan una valoración positiva de los gobiernos, en  próximas elecciones, votarán por el partido político del gobierno respectivo o por aquel candidato que ya gobernó y se postule por un nuevo cargo. En los nuevos tiempos se le llama  “capital político y  rentabilidad electoral”

En las últimas décadas la realización de obra pública en el municipio de Puebla, se ha convertido en uno de los referentes de evaluación significativos de los ciudadanos para calificar el desempeño del gobierno municipal y de quien lo dirige.

A partir de finales de los noventas hasta la fecha, se ha evidenciado la realización de obra pública para producir impactos en la población con el propósito de posicionar la imagen y obtener rentabilidad electoral de aquellos que han sido presidentes municipales  de la capital poblana y que han aspirado a pretensiones electorales de mayor alcance  Luego entonces se impone una lógica  elemental,  ocupar la presidencia municipal de Puebla y realizar magnas obras públicas en el municipio con importantes inversiones presupuestales  federales y/o estatales, son factores de proyección política de los presidentes municipales para su “ futurismo político”.

Es evidente que la obra pública es una acción de gobierno que permite tener la infraestructura necesaria para que en el municipio se tengan mejores vialidades, espacios de recreación, deporte y educativos, así como servicios públicos que eleven la calidad de vida de los habitantes y continuar con el proceso de modernización y urbanización de la ciudad.

A través del siguiente cuadro se muestran indicadores de inversión en obra pública en el municipio de Puebla, según datos del Instituto Nacional para el Federalismo y el Desarrollo Municipal (INAFED).

Como se observa, en sus variantes  se ha registrado un incremento en la inversión de obra pública del gobierno municipal, por lo que hoy tenemos una ciudad más urbanizada. ¿Pero qué impacto político ha tenido la obra pública para algunos de los que han ocupado la presidencia municipal? Veamos…

El ex presidente municipal Mario Marín Torres, según la opinión de quienes integraron los comités de participación ciudadana del gobierno municipal desde su periodo de gobierno hasta la administración de Enrique Doger Guerrero, lo consideraron como uno de los mejores presidentes municipales porque realizó una gran cantidad de obra pública, incluso en su último año de gobierno,  tuvo una ampliación presupuestal gracias al apoyo del gobernador y del congreso. En el 2004, fue postulado candidato de su partido a la gubernatura y se convirtió en el gobernador del estado. La evaluación ciudadana fue terrible contra el # gober precioso”

En su periodo como gobernador realizó inversiones públicas de manera conjunta con el gobierno municipal, y en el trienio de Enrique Doger Guerrero se construyó a iniciativa del gobierno municipal, el Distribuidor Vial 475, cuya construcción implicó una inversión estatal y del municipio cercana a los 168 millones de pesos, con un beneficio para al menos 750 mil habitantes y de manera directa a las colonias aledañas de la zona de Angelópolis.

Desde entonces, se ha especulado respecto a las aspiraciones y posibilidades de que el ex edil Enrique Doger Guerrero pudiera ser candidato a gobernador de Puebla pero ahora, funge como diputado federal y publicita sus acuerdos  estratégicos con la clase política priista  para ser gobrtnsdor.

En esta logica, durante el gobierno municipal de Blanca Alcalá Ruíz, entre los proyectos estratégicos de alto impacto de su administración se construyó el parque Centenario Laguna de Chapulco, que permitió la recuperación de 18 hectáreas para el cuidado del medio ambiente. Si bien el indicador del INAFED, muestra que en el trienio de Blanca Alcalá  hubo más inversión en obra pública, ésta fue de menor impacto, pues no se dieron  mayores recursos del gobierno del estado. De hecho en las notas periodísticas se rumoró que el gobernador en turno, limitó el apoyo al municipio, para que Blanca Alcalá no se convirtiera en la candidata a la gubernatura del estado, para que el ungido fuera Javier López Zavala.

Un factor político importante para el presidente municipal de la capital poblana es tener un gobernador del mismo partido, pero también que sea a fin a su proyecto político, como fue el caso de los dos casos anteriores comentados. A pesar de que se decía que la relación entre el gobernador Marín y el presidente municipal Enrique Doger no era tan cercana, había apoyos del gobierno del estado., para beneficios  mutuos. Lo  inusual fue a contra corriente la  afinidad política de Mario Marín Torres con el proyecto político de Javier López Zavala y no con Blanca Alcalá Ruíz. Asunto de complicidades ….los resultados fueron desastrosos para el PRI-

Pero esta relación de sucesión  puede ser más tensa, cuando el presidente municipal y el gobernador emanan de diferentes partidos como ocurrió con Luis Paredes Moctezuma a quien le tocaron dos gobernadores de partido distinto,  a parte de los desaciertos de su gobierno, que le costaron una sanción de 12 años de inhabilitación en la función pública.

La obra pública realizada en el gobierno municipal de Eduardo Rivera Pérez se enfocó principalmente a la pavimentación de calles y vialidades, remodelación de mercados municipales con sus colores preferidos, adicionalmente  lo que invirtió en su periodo:  mil cuatrocientos millones de pesos con participaciones del gobierno del estado, pero por pertenecer a un grupo político distinto al del gobierno del estado a pesar de ser del mismo partido, no recibió el apoyo para ser candidato a gobernador, aún y con una importante aceptación de la población.

Finalmente según encuestas realizadas, el actual presidente municipal Antonio Galy Fayad, es la opción más proyectada para la candidatura al gobierno del estado  y de acuerdo con la opinión pública, cuenta con la aprobación política del gobernador para tales fines. Es su “gallo” preferido , es afín a su alcurnia  de los “exquisitos “

De hecho desde que era secretario de infraestructura del gobierno del estado, en medios publicitarios, difundía las obras realizadas en su gestión junto con el primer mandatario del estado para posicionar su imagen, para que fuera postulado como presidente municipal.

Actualmente en el municipio, se están realizando obras públicas de mayor “impacto social” y mediático, con inversiones del gobierno del estado para fortalecer la gestión del alcalde  para  catapultarlo a la gubernatura del estado.

Las historias se repiten, el exgobernador Mario Marín Torres proyectó e hizo a su principal hombre de confianza, candidato a gobernador del estado sin el éxito deseado. En 2015  el titular del ejecutivo en el estado está fortaleciendo a quien posiblemente será su sucesor, a través de la realización de obra pública en el municipio.

Pero como ciudadanos, tenemos que analizar, si las obras realizadas han correspondido a necesidades sentidas de la población y no sólo para magnificar la imagen de un gobierno o una persona con propósitos de rentabilidad electoral a través del marketing político. Es obligado legislar al respecto

Mientras tanto… disfrutemos de la urbanización de la ciudad bonita   sin dejar de olvidar que la participación ciudadana  tiene que refrendar el presupuesto participativo.

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