Al encender la primera vela de la Corona de Adviento, el arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, llamó a que sea un tiempo de purificación y de conversión en las acciones.

Al iniciar la misa dominical, Sánchez Espinosa bendijo la corona compuesta con pequeñas ramas de árbol y cuatro velas, tres de color morado y una de color rosa. Luego, el líder de la grey católica encendió una de las tres velas moradas que simboliza, preparar el corazón, la vida y la familia al encuentro de Jesús.

“El adviento es un tiempo de austeridad, de preparación espiritual, de preparación interior, ahorita estamos en la preparación de purificar nuestro corazón y que en nuestro corazón nazca El Niño Dios”, expresó.

Asimismo, el arzobispo destacó que este periodo, en el que la feligresía católica se prepara para la llegada del Niño Jesús, también es una oportunidad para la reconciliación con Dios.

Apuntó que es importante que los creyentes vivan el periodo de adviento como un proceso de preparación espiritual previo al nacimiento de Jesús, por lo cual los ciudadanos deben vivirlo como tal para llegar a la Navidad en comunión con Dios y el prójimo.

“Si no estamos bien con Dios, si no estamos en paz en nuestro corazón, las dificultades de la vida nos aplastan, pero si estamos bien con Dios, si estamos tranquilos en nuestra conciencia, en nuestro corazón las dificultades de la vida las iremos sobrellevando y saldremos adelante. Queridos hermanos, parece que estamos perdidos en un mundo que camina sin sentido, nos preocupan tantas situaciones difíciles y críticas como la violencia”, afirmó. (MIG)