La Organización Mundial de la Salud (OMS) alertó a los países de Europa por la presencia de brotes de dengue, zika y chhikungunya debido al avance del cambio climático que aumenta la variedad de mosquitos que transmiten enfermedades.

Mientras los denominados desastres climáticos aparecen cada vez con mayor frecuencia, las y los expertos han comenzado a mostrar preocupación por que las enfermedades transmitidas por insectos se vuelvan cada vez más comunes, lo que podría extenderse incluso hasta regiones del mundo que en la actualidad donde los padecimientos no son todavía una amenaza.

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En los países ubicados en el hemisferio sur, por ejemplo, el número de mosquitos crece con la llegada del verano, fenómeno natural provocado por el cambio climático: “Y luego, cuando la gente viaja, naturalmente, el virus los acompaña”, advirtió el pasado miércoles Raman Velayudhan, jefe del programa global de la OMS al hablar sobre el control de enfermedades tropicales desatendidas.

Casos de dengue en América, en aumento

El más reciente reporte de la Organización Mundial de la Salud indica que solo en la Región de las Américas (América del Norte, Sur, Central e Insular) se notificaron 342 mil 243 casos de dengue del 1 de enero al 4 de marzo (2023); 86 de estos casos terminaron en fallecimientos.

Sin embargo, en la sesión informativa del pasado miércoles señalaron que la mitad de la población mundial se encuentra en riesgo de contraer la enfermedad del dengue al registrar la OMS hasta 400 millones de infecciones cada año. Más grave aún es que el mismo mosquito que transmite el dengue es un conducto de transmisión del zika y chikungunya, lo que implica que este trío circule de manera conjunta.

¿El dengue es una enfermedad mortal?

La mortalidad por infección del dengue es una posibilidad solo cuando la persona se contagia por segunda ocasión, pues esta reinfección suele catalogarse como un caso grave al provocar insuficiencia orgánica e incluso el perecimiento.

La OMS recalcó que no existe un tratamiento para el dengue, aunque la nueva vacuna contra la enfermedad recién ha comenzado a ganar fuerza.

Uno de los retos a los que se ha enfrentado la OMS ha sido tratar de controlar el arbovirus debido a que los huevos de mosquito pueden mantenerse secos por varios meses al viajar en contenedores. Estos mismos huevos después eclosionan una vez que llegan a un nuevo país a las pocas horas de entrar en contacto con el agua.

De acuerdo con Velayudhan, el mosquito responsable de la propagación de esta enfermedad (que usualmente pica durante el día) acostumbra a moverse entre varias personas a la vez. Por otro lado, alertó que entre los factores que favorecen la reproducción de estos insectos se encuentran el aumento de lluvias y de las temperaturas, así como la escasez de agua (en algunos casos).

Diana Rojas Álvarez, codirectora de la iniciativa mundial de arbovirus de la OMS, indicó que los mosquitos se “están propagando por altitud y por latitud”, además de que ya existen casos “reportados ahora en el sur de Europa” y un rápido crecimiento en Italia.

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Finalmente, la representante de la OMS explicó que los mosquitos del dengue podrían provocar algo similar al covid-19 al crear una nueva enfermedad en humanos, lo que podría suceder al tener una mayor presencia de mosquitos portadores del arbovirus: “Si la población es susceptible, existe el riesgo de que haya grandes epidemias en estas regiones”, puntualizó.