A una semana de iniciar el proceso para renovar la dirigencia estatal de Morena en Puebla, el dirigente interino Aristóteles Belmont Cortés y la exalcaldesa Claudia Rivera Vivanco redoblaron su activismo con giras y asambleas al interior del estado para promover la convocatoria, pero el gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta ha criticado estos actos como un intento de promoción.

Este domingo la dirigencia estatal convocó a militantes y simpatizantes a una de estas asambleas informativas, pero se convirtió en un evento para proyectar a Rivera Vivanco, pues tuvo protagonismo y acudieron sus colaboradores más cercanos de su administración como, el regidor Leobardo Rodríguez Juárez, su vocera, Magaly Herrera López y el exregidor Iván Camacho Mendoza.

En entrevista, Rivera Vivanco aseguró que estas reuniones han sido solicitadas por la dirigencia nacional como parte de la estrategia para convencer a la militancia de participar en el proceso.

“La convocatoria de informar, de dar a conocerla es una instrucción del CEN, es institucional este tipo de asambleas informativas que la dirigencia estatal llevará al interior del estado”, declaró.

La expresidenta municipal explicó que estas asambleas han sido abiertas a toda la militancia para resolver dudas sobre los criterios de la convocatoria y las etapas del proceso.

A la reunión de este fin de semana llegó la secretaria general del Comité Ejecutivo Nacional (CEN), Citlalli Hernández Mora, quien permanecerá en el cargo tras la renovación, pues la convocatoria establece que los únicos cargos que no se renovarán es el suyo y la presidencia nacional.

Barbosa critica promoción

Sin embargo, el gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta criticó la reunión de los morenistas, al advertir que la elección interna se ganará con votos y no con “gritos y sombrerazos” de los fundadores, o con asambleas, menos aún si quienes las realizan carecen de importancia en el partido.

“No se va a resolver a base de gritos y sombrerazos entre los puros y fundadores, se va a resolver con votos y eso es lo que tienen miedo, y no las grillas o cónclaves de gente pequeñita”, declaró en su conferencia de prensa matutina.

No obstante, reconoció que es normal que grupos al interior de Morena se reúnan y manifiesten su interés de ser dirigentes, pero enfatizó que sería mejor abrir la contienda a la participación social.

“Esta es la oportunidad para que Morena abra sus puertas a la participación ciudadana, para que los nuevos dirigentes vengan a enriquecer la participación de personas con otra visión”, exigió el morenista.

De forma oficial, el 1 de julio iniciará el proceso de renovación de Morena, pues desde ese día y hasta el 15 de julio estará abierta la recepción de registros de aspirantes a consejeras y consejeros que serán votados el 30 de julio en las asambleas distritales.