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¡Partidazo! Puebla y Atlas firman cardiaco empate en el Cuauhtémoc

  • Edwin García
La Franja anotó de último minuto pata mantener el invicto y, de momento, el liderato de la Liga MX
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La jornada 5 llegó al Estadio Cuauhtémoc con uno de los compromisos más atractivos de la quiniela: Puebla contra Atlas, quienes se presentaron en esta fecha con todas las expectativas puestas en sí mismos debido a que llegaron como el líder y sublíder del torneo Clausura 2022, respectivamente.

La Franja y los “Zorros” igualaron a un gol y se mantienen como primero y segundo lugar de la competencia, únicamente con la diferencia de goles como principal distinción.

La intensidad y movimiento de balón arrancaron del lado visitante debido al dominio que mostró el equipo rojiblanco durante los primeros 10 minutos. Un par de llegadas sirvieron para meter presión al arco defendido por Antony Silva y hacer despertar a los locales, quienesvolvieron a conseguir una muy buena entrada en apenas la quinta fecha del certamen.

La cosa tomó seriedad con la primera llegada de peligro por parte de los pupilos de Nicolás Larcamón, aunque las imprecisiones y gran actuación del arquero Camilo Vargas impidieron que la Franja pusiera los primeros números en el marcador.

Al frente, Maximiliano Araújo y Fernando Aristeguieta comandaron el ataque camotero y mandaron un par de centros que sirvieron para tomar mal parado al rival; sin embargo, ninguno de estos embistes sirvió para perforar el arco.

Fue así que se cerró el telón del medio tiempo para dar paso al entretenimiento ya infaltable en el dos veces mundialista.

La nueva apertura, en cambio, fue más inesperada. Puebla se tomó en serio el apoyo de la primera mitad y mandó hombres al frente en búsqueda de romper el cero. Una jugada bastante atorada le dejó a Israel Reyes la cama tendida. El defensor no dudó en prenderla adelante de medio campo y con un verdadero golazo hizo saltar a todos de la butaca para festejar la anhelada anotación.

Sin embargo, la jugada no se hizo válida tras una revisión en el VAR. El marcador continuó vacío.

Por si la incertidumbre no fuera suficiente, una jugada en el área poblana mandó nuevamente el silbante a la videoasistencia. En esta ocasión la decisión decretó penal en favor de los “Zorros” debido a una mano de Juan Pablo Segovia.

Al 60, pena máxima en favor de los jaliscienses que no hizo más que engrandecer al local: Antony Silva atajó un penal cobrado por Julio César Furch entre un abucheo brutal por parte de la tribuna. El Estadio Cuauhtémoc pesó.

Pero el verdadero gol sí llegó y en favor del actual campeón. Una jugada que inició en media cancha y que llegó al área mediante la conducción terminó por incrustarse para abrir la pizarra. La zaga poblana no pudo con el control de Julián Quiñones, quien llegó por el costado izquierdo y al minuto 85 silencio a los 23 mil 170aficionados congregados en el coloso de la colonia Maravillas.

Pero la fiesta no terminó ahí. Con el marcador adverso y el balón en dominio de la visita, llegó una conducción poblana para llevar el peligro hasta cabaña rival. Ya con todos los cambios hechos y nada más que el corazón larcamonista sobre el terreno de juego, Puebla se inventó una jugada para poder igualar la pizarra y dejar las cosas en 1-1. 

Este esférico milagroso llegó por medio de un tiro de esquina, no sin antes dar un bote de peligro en el área. Guillermo Martínez, quien ingresó a regañadientes de la afición y no ha terminado de simpatizar con la hinchada, sacó de lujo una chilena que hizo estallar al Cuauhtémoc y externar ese grito de gol que se ahogó varias veces durante los 90 minutos.

Esta unidad le vale a los “Larcaboys” llegar a 11 puntos en el torneo y mantenerse, de momento, como líder general del torneo mexicano.

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